¡Aleluya! Esta será la voz en grito que seguro, muchos aficionados béticos van a proclamar al saber que, de una vez por todas, el miniculebrón que ha protagonizado Pezzella, está en aras de solventarse.
Paso a paso, el Betis ha ido salvando las pequeñas trabas que le ha ido planteando River Plate a lo largo de las últimas semanas y este jueves ha sido cuando el famoso avión, ha partido desde Argentina a España, rumbo hacia la capital sevillana con el nuevo central verdiblanco a bordo.
Así las cosas, el Betis ya tiene en sus manos a una de sus prioridades en este mercado estival de fichajes con vistas a reforzar la defensa heliopolitana, cuya mediocridad se ha instalado desde hace algunas temporadas.
Pezzella, que pisará territorio español a primera hora de la mañana, pasará el reconocimiento médico previo a su fichaje por el club verdiblanco para más tarde, rubricar su contrato con el equipo de las trece barras por las próximas cinco campañas.
El Betis por su parte realizará un desembolso final de 2,2 millones de euros por la mitad de la propiedad del futbolista, tras solucionar los flecos legales pendientes que el mismo Macià reconocía hace días al ser cuestionado por la tardanza del jugador en desplazarse hasta Sevilla.
Pezzella viene con la vitola de central con carácter y buen juego aéreo, además de rapidez y cierto aseo a la hora de sacar el balón.
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