La mamarrachada, o al menos a mí me lo parece, de Halloween parece haberse instalado esta semana también en el Xerez. Los caramelos han llegado envenenados y el susto lo tienen aún en el cuerpo aquellos que pretenden que la entidad xerecista siga superviviendo, aunque sea con la mala calidad institucional que lo viene haciendo, hasta donde las fuerzas lleguen. Y es que, aunque el tema venía de largo, ha tomado fuerza oficial, o casi oficial, que Francisco Gallardo, ex secretario del consejo de administración presidido por Ricardo García, es el actual propietario del paquete accionarial mayoritario de la entidad. En entrevista que publicamos en la página de apertura de la sección de Deportes, Juan Miguel Becerra califica de “no casual” la aparición en escena del letrado sevillano. Y es que si el pago por dación se hizo en enero, si desde enero Gallardo es el máximo accionista por qué aparece ahora, justamente ahora, en el escenario público azulino.
Gallardo no ha querido hacer declaraciones a este medio, más allá de “ya hablaré cuando tenga algo que decir”, aunque sí se ha expresado en otros de la ciudad y explica que está dando los pasos para convertirse oficialmente en el máximo accionista. ¿Qué es lo que pretende? ¿Quién acepta cancelar una deuda a cambio de unas acciones que no valen absolutamente nada y para ser el máximo accionista de una sociedad que lo único que tiene son telarañas y una deuda de unos veinte millones de euros y en una categoría donde los ingresos son cero, donde hay gastos que afrontar y, sobre todo, con una convenio de acreedores que hay que comenzar a pagar en el año 2015, aunque algunos indican que en el 2016, y que se sabe que es imposible de asumir, sobre todo si el equipo sigue jugando en la Primera Andaluza o en Tercera o, incluso, en Segunda División B, porque esa categoría económicamente hablando es caótica ya que tiene muchos gastos y escasos ingresos?
Son muchas preguntas en una sola, que no tiene una respuesta convincente. Además, Ricardo aparece diciendo que todo es nulo, que es falso, que va a presentar querellas. A quién se cree. Por qué hay que creer a Ricardo que desde que llegó ha mentido más que ha hablado. Por qué hay que creer a Gallardo que ha comentado públicamente que iba a hacer una ampliación de capital, que se estaban ordenando los documentos para hacerla y que lleva diez meses, presuntamente, como máximo accionista y no ha sido capaz de mover un dedo para sacar al Xerez Club Deportivo, Sociedad Anónima Deportiva, del atolladero. ¿A quién se cree en toda esta historia? A quien montó una pantomima de junta general de accionistas o a quien, teniendo los documentos en su poder y siendo máximo accionista, no se presentó como tal en la citada junta general. A quién creer, a quien ha dejado al Xerez bajar a las catacumbas de la Regional o a quien ha sido cómplice igualmente del desaguisado institucional en el que se encuentra sumido el equipo. O hay que creer al ínclito Jesús Gómez que parece haber sido una figura decorativa en todo esto, que fue quien dio la cara y a quien estuvieron a punto de partírsela por meterse donde no se sabe bien si él sabía dónde.
Todo este tinglado que se está montando alrededor del Xerez Club Deportivo, Sociedad Anónima Deportiva, con unas acciones que no valen absolutamente nada y con una sociedad en quiebra técnica y al borde de la disolución es tan esperpéntico que uno ya no sabe si hay connivencias de por medio, si hay algo de verdad o todo es mentira, porque documentos haberlos haylos y los compañeros que lo han sacado negro sobre blanco no mienten, pero también hay papeles de las ventas de las acciones, desde los tiempos de Oliver, que nadie sabe si son ciertos o son una mentira como tantas como desgraciadamente han conducido a la entidad a la situación prácticamente irreversible en la que se encuentra.
Yo, el día en que alguien diga vengo a salvar esto y aquí están, encima de la mesa, los millones necesarios y aquí están las gestiones efectuadas con los organismos públicos y aquí están las conversaciones con el juzgado de lo mercantil para intentar hacer viable el convenio, que ahora mismo es imposible de asumir, entonces me comenzaré a creer algo, mientras tanto me da el pálpito que todo es una chapuza que lo único que persigue es la liquidación más pronto que tarde de la entidad, más allá de que la liquidación pueda llegar sin necesidad de tantos líos y de la mano del juzgado de lo mercantil por la incidencia concursal presentada por la Liga de Fútbol Profesional, aunque su presidente declarase que era una cuestión de la comisión de seguimiento. Hasta en eso se ha mentido.
El entorno propicia que el Xerez sea el equipo de la gran mentira, que está sostenido por gente que se agarran a un sentimiento y que no quieren que se pierda, pero parece ha llegado la hora de que muchos remen en la dirección de llevárselo por delante cueste lo que cueste y haya que hacer las maniobras que haya que hacer. Y si esto que escribo no es así, que los que de verdad mandan, los Ricardo o Gallardo en este momento, digan la verdad y aporten las soluciones precisas y necesarias, porque los de la Gestora demasiado hacen con mantener al equipo con vida, aunque sea con respiración asistida, pero a nivel accionarial nada pueden hacer a menos que Energy o Gallardo les regalen las acciones, que no lo harán y solo ellos saben las razones...
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