El Loco de la salina

¿Qué va a ser de nosotros?

En vez de tener una célula madre, los ricos tendrán unos armarios bien preparados.

Es para volverse loco. Estos americanos no tienen enmienda. Ya han inventado el pelotazo del siglo y nosotros aquí a verlas venir. Por lo visto he podido leer en el periódico del manicomio que lo que hicieron con la oveja Dolly lo pueden hacer también con los curritos de a pie, es decir, que funciona para los humanos. ¡Como si no hubiera ya bastantes ovejas entre la especie humana! Al parecer el hallazgo ha tenido lugar en Oregón, ciudad norteamericana de Estados Unidos de América del Norte.

Y, aunque dicen que no y que no, está claro que a la vuelta de la esquina van a aparecer los primeros seres humanos clonados. ¿Sabe Vd. lo que eso significa? ¿Se da cuenta de lo que van a hacer con nosotros? Los listos de Oregón aseguran que lo que pretenden es obtener un embrión para extraer de él células madres. Eso digo yo, de la madre que los parió. Con otras palabras, no paran de repetir que el invento es inofensivo y que va a ser muy beneficioso para la humanidad, porque esas células madre se podrían utilizar para regenerar órganos sin temor a los rechazos. ¿Cómo va a rechazar uno lo que es suyo?

Yo no estoy muy seguro, pero la cosa se va a desarrollar de la manera que le voy a explicar. Le sacan a Vd. la célula de marras y a partir de ahí todo es coser y cantar. Si Vd. se quema, pues cogen su célula madre y a partir de ella le preparan la piel que se le va a poner en el sitio quemado. Como la piel nueva es suya, aquí paz y allí gloria. Que Vd. se queda calvo, pues lo mismo, pero con el pelo. Que Vd. tiene el corazón como una matraca, pues se acabó la historia, le preparan un injerto, se lo plantan y a correr.

La verdad es que todo esto a mí me tiene un poco preocupado. Y le voy a explicar por qué. Estos americanos son los mismos que experimentaron la bomba atómica en Japón y ya se podrá figurar que el asunto no fue para tomárselo a broma. Además, después vienen los daños colaterales como ocurrió en la guerra de Irak. Y ya parece que lo estoy viendo. Los que tengan dinero lo van a tener muy fácil. Se dejan sacar su célula madre, la guardan en un armario especial que ya inventarán también y a esperar que vengan los tiempos delicados para la salud del millonario.

A partir de ahí, el tema se perfeccionará, y en vez de tener una célula madre, los ricos tendrán unos armarios bien preparados para sustituirse aquellos órganos que empiecen a dar la lata por culpa de la edad. Esos armarios, bien surtiditos, costarán una barbaridad y dispondrán de compartimentos para guardar un corazón nuevo, una pierna, una oreja, un brazo…, es decir, recambios por si algo fallara en el organismo. Un lujo exclusivo de aquellos que tengan euros por un tubo. Y aquí en España los hay. Un ejemplo podría ser ese banquero que ha sido capaz de reunir a través de él mismo y de su familia más de dos millones de euros en 24 horas para pagar la fianza y no tener que dormir una segunda noche en el talego. ¡Qué habilidad! ¡Qué capacidad le ha debido sobrar al chorizo para reunir tal cantidad en tan poco espacio de tiempo! Uno, que no es tonto, aunque esté loco, se imagina que ha pagado la fianza del fondo sobrante.

Bueno, a lo que iba. Estos son los que van a disfrutar del invento americano. Se podrán cambiar todas aquellas partes de su cuerpo que con la edad se vayan viniendo abajo. No piensen mal. Esa también. Dios mío, la que nos espera a los pobres. Y es que los ricos no se conforman con vivir bien, sino que quieren vivir toda la eternidad a base de chapuzas orgánicas. Lo siento por ellos, porque no hay cosa más dulce que morir cuando llega la hora natural y no morir perdiendo poco a poco las piezas de recambio del mecano. Espero no vivir tanto para no tener que ver las virguerías que piensan hacer con estas carnes nacidas del barro.

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