Arcos ya tiene aprobado su Presupuesto General de 2012 después no de un intenso debate, que hubiera sido lo propio dada la importancia de la operación, sino de una larga exposición que en ocasiones desprendió un cierto tufo a mitin electoral. Con independencia del matiz, el equipo de Gobierno hizo valer su mayoría para aprobar unos presupuestos que mantienen la esencia de las cuentas que se vienen presentando desde el ejecutivo durante las últimas semanas, con un montante total de 24,7 millones de euros, tanto de gastos como de ingresos.
La novedad radica en prácticamente la eliminación del superávit previsto en un principio -700.000 euros-, ya que se equilibran los gastos y los ingresos con el fin de dar posibilidad a los desempleados de trabajar en el Ayuntamiento para la ejecución o mejora de infraestructuras, en un programa que busca, precisamente, atender los casos más perentorios de la familias arcenses.
Después de más de una semana, eso sí, de constantes reuniones y de haber dilatado el pleno en busca de consenso, los grupos no se pusieron de acuerdo, o al menos es lo que dejaron claro al ausentarse del salón plenario como medida de rechazo. Ya el alcalde lo dejó bien claro: se trataba de negociar, no de claudicar, explicó José Luis Núñez (PP).
El grupo socialista volvió a lamentar que el pleno se celebrara por la mañana, restando a la sesión público e interesados en el orden del día. Su portavoz, Isidoro Gambín, criticó la propuesta presupuestaria del Gobierno porque, entre otros motivos, demuestra “la falta de estímulo para los parados” y porque el recorte presupuestario en el capítulo uno, finalmente de unos 1,6 millones de euros, significa la terminación de la relación laboral con el Ayuntamiento de unos 120 trabajadores, en un gran porcentaje interinos que podrían salir del Consistorio a finales de mes. Igualmente, los socialistas rechazaron despidos que tienen en su origen, según argumentan, una caza ideológica, incluso “una limpieza étnica”, como mencionó duramente el portavoz. Por ello, auguró que los despidos provocarán fuertes indemnizaciones que el Ayuntamiento no puede asumir, ya que los afectados acudirán a la justicia laboral.
El portavoz también esgrimió como motivos de su rechazo a los presupuestos los presuntos recortes en educación y bienestar social. Más tarde, el portavoz del PP explicó que ha tenido que ser el Ayuntamiento el que asuma inversiones y gastos propios de la Consejería de Educación para adecentar los colegios de la localidad.
Gambín lamentó que, en detrimento de la plantilla municipal, el Gobierno no se reduzca el sueldo, ni tampoco el de sus cargos de confianza, que para el PSOE hubiera sido un ejemplo de que, efectivamente, la factura de la crisis hay que pagarla entre todos. Posteriormente, el portavoz del PP, con un informe de intervención en mano, señaló que la media del sueldo político es de casi 1.000 euros menos que durante el mandato anterior. En este sentido, el fantasma de la gestión socialista al frente del Ayuntamiento durante ocho años volvió a planear sobre la larga sesión plenaria.
El grupo socialista culpó también al Gobierno de hacer números “para cuadrarlos con el plan de ajuste”. En su particular propuesta, pidió una rebaja de 250.000 euros en gratificaciones y productividades, la paralización “absoluta” de contrataciones y la eliminación de contratos que no se hayan convertido en definitivos, concretamente los realizados supuestamente a personas afines y allegadas al equipo de Gobierno. Y si hay que despedir a alguien, dijo, que sea de una forma temporal.
Asimismo, reclamó la desaparición de la asignación a los grupos y concejales por asistencia a pleno. Además, recortes en gastos de combustible, eléctrico y en medios de comunicación, que según los papeles fueron mucho más elevados el anterior mandato, como explicó el delegado económico con la ayuda de una serie de gráficos.
Estas propuestas socialistas tienen cabida en un presupuesto alternativo presentado a última hora y que no dio lugar a su debate. Entre las propuestas también se encontraba reservar para indemnizaciones para la plantilla un total de 75.000 euros, como también habilitar una partida de 1,4 millones de euros de ayuda al sector de la construcción, donde hay cientos de personas sin prestación y en situación de exclusión social; es decir, un fondo de solidaridad municipal gestionado por el Ayuntamiento, el INEM y los sindicatos “para evitar que se siga enchufando a diestro y siniestro”. Gambín llegó a decir que su presupuesto alternativo puede conseguir resultados “sin tener que despedir a nadie”. En un momento dado, acusó al ejecutivo de haber sometido a un grupo de trabajadores a una presión psicológica durante el último año.
Sin esperar un segundo turno, el grupo socialista decidió marcharse del pleno “por defender a los trabajadores”, momento en que al alcalde lo acusó de “intentar montar un espectáculo”. Núñez recordó que los socialistas también están recortando en instituciones como la Junta sin que los socialistas de Arcos se manifiesten en este sentido.
Por su parte, el concejal del grupo Ven-T, Antonio Ortiz, defendió la importancia de la figura del interventor municipal como testaferro de la situación económica real, pero su explicación, más allá de su importancia, fue tan estrambótica como original, al sacar de la mochila un kilo de pan que empezó a cortar en pedazos con una navaja para ejemplificar el reparto del presupuesto. En este sentido, lamentó profundamente que el dinero municipal sirva para mantener la plantilla y pagar a los bancos en detrimento del ciudadano. Por ello, defendió el recorte de la plantilla en un 50 por ciento, como también los sueldos del Gobierno, la eliminación de coches oficiales y gestionar la reducción de la deuda bancaria, entre otras propuestas.
Ortiz explicó que el presupuesto el Gobierno es “más de lo mismo” para seguir soportando el sistema y “no coger el toro por los cuernos”. No obstante, matizó que personalmente acude al Pleno para “ayudar, apoyar al alcalde y al Gobierno, y no a obstaculizar”. Así, irónicamente mostró su apoyo a los presupuestos aunque finalmente de nada sirvió al no encontrarse presente en la votación. A partir de ahí, Ortiz realizó un discurso sobre el sistema político español en general, para culpar el exceso de políticos, la dependencia de la banca y una política económica que no aporta beneficios al ciudadano, incluso lanzando comentarios sobre la existencia del Senado que posteriormente despertaron gran malestar en el senador arcense del PP Sebastián Ruiz.
Con la marcha de Antonio Ortiz, el debate dejó de serlo para convertirse en un largo monólogo de los portavoces del Gobierno.
Ai-Pro habla de “cobardía”
El de Ai-Pro, Manuel Erdozain, señaló que la marcha del pleno del grupo socialista fue un acto de “cobardía”, como también rechazó “la puesta en escena” del concejal de Ven-T, además de lamentar el desprestigio de la clase política puesto de manifiesto. Igualmente, también criticó al PSOE por su herencia económica como el origen o causa de las medidas que ahora se toman “forzosamente”.
En contraposición, señaló que el presupuesto del Gobierno municipal es “valiente, sincero y reflexivo respecto al pasado reciente”, por lo que volvió a hablar de un gasto desmesurado y una nefasta gestión sobre los recursos públicos que atribuyó a los gobiernos anteriores.
El portavoz de Ai-Pro imprimió un carácter de “optimismo” al Presupuesto frente al discurso “derrotista” de la oposición. Para echarlo en cara, mostró varios números de este periódico, uno de ellos con entrevista al exprimer teniente de Alcalde Joaquín Macías donde justifica en octubre de 2007 recortes de la plantilla.
Asimismo, defendió aspectos puntuales del Presupuesto como los 200.000 euros destinados a las familias, y dijo estar elaborado pensando en los más de 30.000 habitantes de Arcos, como también defendió el plan de ajuste como una herramienta para trasformar el Ayuntamiento y su gestión. “Algo histórico”, señaló en alusión al pago de la deuda con los proveedores.
El Presupuesto también crea una partida de 200.000 euros como apoyo a la Ley de Dependencia, además de recortar en fiestas y en otras materias. “Es el Presupuesto de un gobierno que quiere a su pueblo”.
También crea partidas nuevas, las destinadas a las barriadas urbanas, “para acudir a los pequeños problemas de los vecinos”. El portavoz de Ai-Pro defendió sobre todo una política “de cercanía” y de reingresar el dinero en beneficio de los ciudadanos, para lo cual volvió a enumerar las principales inversiones previstas, como la adecuación de la entrada de El Santiscal. Para este capítulo se destina 1,2 millones de euros.
Erdozain acusó a los socialistas de abandonar sus propias políticas sociales, para asegurar que Ai-Pro enarbola esa bandera de lo social. Al encontrarse solo y sin oposición alguna, la exposición del también delegado de Urbanismo duró cerca de una hora. En este sentido, el alcalde explicaría posteriormente que, como se había marchado la oposición, los tiempos se redistribuyeron dando más al equipo de Gobierno.
Como que Erdozain sustrajo gran parte del discurso al PP, su portavoz, Sebastián Ruiz, acortó su tiempo para, con mayor profusión de datos y gráficos, justificar el Presupuesto aprobado. Así, comenzó dando las gracias las gracias a los ciudadanos de Arcos “por comprender la situación de máxima dificultad económica del Ayuntamiento”. Dijo que éste es el Presupuesto “del cambio” para una ciudad con posibilidades: “Hoy comienza una realidad de futuro y de empleo”, y dijo que el Presupuesto está encaminado a ayudar a los más de 6.000 parados de Arcos, “un presupuesto que cuida mucho el dinero de los arcenses, reinvirtiéndolo en la ciudad”.
Sebastián Ruiz lamentó que la oposición no atienda a su responsabilidad, como crítica a la ausencia de los dos grupos. Dijo, en alusión opositores, que no se puede hacer política “desde las tripas, sino desde la cabeza”.
“El problema vino cuando el PSOE se llevó el presupuesto a su sede”, explicando que el entendimiento inicial con el Gobierno se disipó, tal vez, por la diferencia de opiniones y criterios en el seno del socialismo arcense. Igualmente, puso en entredicho el presupuesto alternativo del PSOE porque, al ausentarse, no lo defendió en el Pleno; un presupuesto que no se podría haber aprobado al faltarle la documentación, esgrimió.
Ruiz recordó que el decreto de pago a proveedores se verá ampliado en más de 300.000 euros, hablando abiertamente de la empresa Producciones Guadalquivir, que nunca cobró los conciertos que ofreció en las carpas de verano. Recordó la necesidad de cumplir a rajatabla el plan de ajuste, como también explicó que las medidas del PSOE en su presupuesto alternativo no hubieran cumplido a partir del primer año los parámetros del plan de ajuste.
Igualmente, mostró la documentación sobre las gratificaciones concedidas por el gobierno de la socialista Josefa Caro, con cantidades mensuales de 51.600 euros, 49.700, 36.600 ó 113.431 euros; más de 300.000 en pocos meses. El Gobierno las ha reducido en 140.000 euros, “y vienen a hablarnos de recortes”.
A lo largo de su intervención, Ruiz Reyes pidió al PSOE que asuma sus responsabilidades y ayude al pueblo de Arcos, “porque se pueden compartir propuestas”, al tiempo que recordó que el fin del pleno era la aprobación del Presupuesto General y no la amortización de plazas laborales, que es donde radican las principales diferencias con la oposición.
El portavoz del PP se detuvo en explicar el plan de infraestructuras por valor de unos 700.000 euros para la contratación de desempleados procedentes sobre todo del sector de la construcción.
Sobre otros gastos denunciados por la oposición, se reiteró en que el actual Gobierno cobra menos, como también ha logrado reducir gastos como el telefónico, además de racionalizar las compras municipales, entre otros motivos porque -aseguró- ahora se paga a los proveedores. En su exposición de gráficos, comparó los presupuestos de los socialistas con los de su ejecutivo, para declarar que ahora se invierte más en servicios sociales, medio ambiente y en barriadas urbanas, que anteriormente gozaba de cero euros de inversión. En fiestas han reducido el gasto en unos 90.000 euros y se ha dotado a Turismo de una partida de unos 140.000 euros, es decir, se ha cuadruplicado en términos económicos la apuesta por este sector.
Recurriendo a la literatura, recordó los versos sobre Arcos: el bergantín varado a orillas del Guadalete…, para ofrecer su propia versión: “El barco varado sale a flote”. Ruiz acabó como empezó, dando las gracias a los ciudadanos por su comprensión y felicitando el trabajo del alcalde popular.
El discurso final del alcalde recaló sobre todo en la ausencia del PSOE, al que acusó de haberse aprovechado del talante dialogante del equipo de Gobierno, en alusión al proceso finalmente frustrado. Asimismo, lo acusó de, aun sabiendo que es el correcto, negarse a la aprobación del Presupuesto, lamentando en este sentido la dejadez de funciones con su marcha de la sesión. Núñez llegó a criticar que los concejales socialistas no acudieran el domingo a la procesión del Corpus, “dando la espalda a las tradiciones de Arcos”. También lo acusó de “montar el número para tapar su incapacidad” y agradeció, sin ser grupo municipal, la estoica presencia del político andalucista Sergio Carrera.
El alcalde terminó hablando de los enchufes laborales del PSOE y agradeciendo el trabajo del Gobierno en la elaboración presupuestaria, principalmente de los delegados Sebastián Ruiz, Carlos de la Barrera y Manuel Erdozain.
Medidas para el camping y el sector del taxi
Antes del debate presupuestario se abordaron dos puntos en el orden del día, los cuales no han sido supuestamente abordados previamente en comisión informativa, por lo que el PSOE se cuestionó la legalidad de la sesión.
El alcalde justificó la premura de estos puntos con la importancia de abrir el camping de Arcos después de casi cuatro años cerrado al público, como también defendió la urgencia de salvar un trámite relativo al sector del taxi en la ciudad. Para José Luis Núñez, ambos temas son tan importantes que no caben más retrasos administrativos o burocráticos.
En concreto, el punto del camping devolvió un plazo de treinta años de concesión más otro cinco de prórroga al futuro gestor de este espacio. El portavoz de Ai-Pro lamentó los obstáculos del grupo socialista para que el punto saliera adelante, pero sobre todo defendió las medidas para la reapertura del camping lo antes posible, beneficiando tanto al turismo como a la posibilidad de creación de empleo. El portavoz avanzó que existen varios empresarios interesados en la explotación del camping.
El punto salió adelante con los votos favorables del equipo de Gobierno y la abstención del PSOE.
El segundo punto instó a la Junta a ayudar a los taxis de Arcos ante la inversión que tendrán que realizar para ajustarse al nuevo decreto andaluz que ordena la instalación de un taxímetro y una impresora para la emisión del ticket o factura. La inversión estimada por taxi es de 1.500 euros para esta dotación y el plazo legal que se da al sector para estas adaptaciones es de dos años. El portavoz de Ven-T dio su visto bueno porque no sólo se ayuda al empresario del taxi, sino que se protege al usuario. Igualmente, el grupo socialista dio su apoyo al punto en beneficio del sector, el cual acusa, como todos, la crisis económica.
Su portavoz pidió una subvención adicional a Fomento, aunque también demandó que el gremio de taxistas haga lo propio a título particular para que se incrementen, si cabe, las ayudas al sector. Aunque la oposición se quejó de falta de información, el alcalde defendió que trasladar este punto al Pleno se corresponde con el interés de dar mayor importancia a la instancia a la Junta. Desde Ai-Pro, Erdozain lamentó las trabas al punto por parte del PSOE, pero sobre todo la demora que, a esas alturas, ya empezó a manifestar el pleno. En parecidos términos, el portavoz del PP se posicionó a favor del sector y, por tanto, de la posibilidad de que sea subvencionado por la Junta para su adaptación al decreto. Pese a los matices, el punto fue aprobado por unanimidad.
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