A San Fernando volverá Cristian, de 13 años, con dos "regalazos" que le ha entregado el ministro del Interior: un balón de fútbol del equipo que espera gane esta noche, el Real Madrid, y una medalla colgada de su solapa por su mejor jugada en el San Fernando Infantil B: salvar la vida a un futbolista del equipo rival.
Desde este miércoles, Cristian puede presumir de tener la medalla al mérito de protección civil por hacer "algo" que, asegura a EFe, casi ni pensó sobre el césped el pasado 18 de enero cuando su equipo disputaba un partido con el Medina.
Él, atento lateral izquierdo al quite de un córner de su equipo, se percató al igual que el resto de los chavales que uno de sus compañeros había chocado con un defensa del Medina, Daniel Delgado.
Del golpe en la cabeza, Daniel se desplomó y se quedó quieto. Todos se paralizaron también, salvo Cristian que, con el aplomo de quien sabe lo que tiene que hacer, puso a Daniel en posición lateral, también llamada de seguridad, le abrió la boca y sacó la lengua para evitar que se asfixiara.
"Lo había visto en televisión, en un partido al que a Torres le pasó algo parecido", dice a Efe de forma tímida y acento gaditano este niño que sigue dando patadas a un balón -ahora en otro equipo- y que sueña con ser futbolista.
Las firmas de sus ídolos, los jugadores del Real Madrid, se lleva como un tesoro en un balón guardado en una bolsa que el ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, le ha entregado al término del acto celebrado en la Escuela Nacional de Protección Civil, en Rivas-Vaciamadrid.
Un regalo que ha recibido fuera de los focos, a buen seguro de no levantar ninguna suspicacia a pocas horas de la celebración del Clásico en el Camp Nou.
Eso sí, al lado de Marlaska, ha posado con su medalla en una foto de familia con el resto de los premiados: militares, policías, guardias civiles, voluntarios, ciudadanos anónimos y también periodistas.
Entre los galardonados por Protección Civil, agentes que participaron en las labores de auxilio durante la gota fría del Levante en septiembre o el capitán del grupo de aviones de la Guardia Civil Vicente García por el traslado en condiciones muy adversas de una mujer para recibir de forma urgente un trasplante.
También galardonado Sergio Pérez, un militar fuera de servicio que participó en el rescate de un menor de 13 años que se había perdido en el parque de los Picos de Europa, en la zona de León, o José Ángel Viesca por salvar a varias personas de morir ahogadas durante el descenso folklórico del Nalón.
Los aplausos más emotivos han sido para la medalla a título póstumo a Miguel Tomé, fallecido hace dos días y con una larga trayectoria profesional dedicada a la prevención y actuación en catástrofes naturales.
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