Un auténtico infierno frente a sus casas. Eso es lo que viven desde hace un año los vecinos de la calle Macías Belmonte de Huelva, en el barrio de El Molino, que tienen que soportar las peleas, malos ambientes, plagas y suciedad que se genera a diario en un edificio ocupado.
La situación se ha tornado tan insostenible que el Ayuntamiento de Huelva ha decidido tomar cartas en el asunto y este pasado lunes se reunió con los vecinos para lanzarles un mensaje de tranquilidad y de compromiso de hacer todo lo que esté en su mano hasta que llegue la solución definitiva, que pasa por el desalojo judicial del inmueble.
Teresa Paus, representante de los vecinos afectados, ha relatado a Viva Huelva el calvario que han pasado, y siguen pasando, desde que en julio del año pasado se colaran dos personas, con sus dos perros, en un edificio de la calle Macías Belmonte que estaba construido pero que no se llegó a habitar.
Un año después ya no hay dos inquilinos, sino que el inmueble parece “un hotel lleno de gente”, incluso menores adolescentes, y en el inmueble reina de todo menos la buena convivencia: “Hay drogas, prostitución, peleas, amenazas, suciedad, ratas... Todo lo indeseable”, relata Paus.
La solución final pasa por el desalojo judicial del edificio, tras la denuncia presentada por los vecinos con el visto bueno de la propiedad (una constructora), pero la justicia es lenta, y más después del parón por el coronavirus, de modo que urge acatar medidas que al menos relajen el ambiente, porque los vecinos están muy crispados y los menores de la calle “no quieren salir a la calle, tienen miedo y ansiedad”.
Ante esta situación, el alcalde de Huelva, Gabriel Cruz, ha anunciado que “habrá presencia policial permanente hasta que el edificio se desaloje”. De este modo, el primer edil ha refrendado el compromiso de “poner todos los recursos que el Consistorio tiene en sus manos para resolver el problema cuanto antes, pues los vecinos están viviendo una situación insostenible”, ha indicado el Ayuntamiento.
Así lo ha expuesto Cruz a estos vecinos con los que se ha reunido reunidos en la sede de la Asociación de Vecinos Nuevo Molino y a los que ha explicado las pautas de actuación del Ayuntamiento para atajar “a la mayor brevedad” el problema de ocupaciones ilegales de la calle Macías Belmonte.
Un encuentro en el que el también han acudido representantes de diferentes grupos de la oposición municipal y que los vecinos valoran de forma “muy positiva”.
En este sentido, Cruz ha esgrimido que “esta situación, aunque compleja, hay que resolverla pronto y, lo más importante, sin cabos sueltos, poniendo en marcha los mecanismos pertinentes para evitar que esta situación se reproduzca en otro sitio”.
Asimismo, el regidor ha avanzado que desde el Consistorio se hará un requerimiento a los propietarios para que se selle la edificación en cuanto se produzca el desalojo. “También seguiremos trabajando el tema desde los Servicios Sociales abordando la situación de familias vulnerables y menores”, ha señalado, incidiendo, por otra parte, en que “la colaboración ciudadana es fundamental, así como dotarnos de un procedimiento para detectar este tipo de situaciones y darle respuesta inmediata”.
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