Sierra Nevada ha incorporado 77 nuevos cañones para producir nieve, unos dispositivos que se distribuyen por tres áreas principales de la estación andaluza y que aumentan las opciones de innivación con una mayor eficiencia energética.
Según ha informado Cetursa, la empresa que gestiona la estación, estos nuevos cañones de última generación se han incorporado al sistema de nieve producida de Sierra Nevada para la temporada invernal 2021-22.
El estreno de estos dispositivos supone un paso más en la renovación y modernización de los dispositivos de innivación del dominio esquiable de Sierra Nevada y se suman a los 210 que ya se instalaron.
Los cañones destacan por su alto rendimiento en condiciones marginales de temperatura y humedad, y por su alta eficiencia en el consumo de luz y agua.
Precisamente, el rendimiento eléctrico de estos dispositivos ha permitido su cofinanciación con el Programa Operativo FEDER de Andalucía a través de los recursos destinados a proyectos con ahorro energético.
Proceden de la multinacional italiana Techno Alpin y el departamento de Nieve Producida los está instalando con el criterio de consolidación de nieve de los ejes principales de la estación.
Así, 63 son cañones fijos y los 14 restantes son móviles, lo que permite reforzar la producción allá donde se requiera.
Por características técnicas, 40 son cañones de alta presión, con menor capacidad de producción pero con más posibilidades de funcionamiento en condiciones meteorológicas adversas.
Los 37 dispositivos de nieve de baja presión permiten una mayor capacidad y reparto de producción, por lo que son especialmente indicados para innivar grandes áreas y pistas con fuerte pendiente.
Esta nueva remesa se distribuirá en las zonas de Borreguiles, Río, Loma de Dílar y Parador-Cauchiles.
Durante las últimas tres temporadas, la renovación del sistema de nieve producida ha propiciado la baja de más de 180 viejos dispositivos, entre automáticos y manuales.
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