El gobierno local de PSOE y Cs va a llevar al próximo Pleno municipal la puesta en marcha de un plan de ordenación de los recursos humanos del Ayuntamiento, que contempla acabar con la temporalidad del 70% de la plantilla municipal, cifrada en 1.405 trabajadores. De este modo, y en línea con el plan de estabilidad aprobado por el Pleno en enero de este año, el Consistorio se marca el reto de consolidar el empleo de más de 900 empleados antes del final de 2020, indicó el concejal de Personal, Carlos Alberca. Un reto forzado también por la obligación de dar cumplimiento al acuerdo de marzo de 2018, entre el Ministerio de Hacienda y las principales centrales sindicales que pedía que las administraciones públicas no mantuvieran más de un 8% de temporalidad en sus plantillas. “Hay que afrontar de forma inminente la situación de desorganización del personal, que no permite dar un servicio público adecuado y que no reconoce la carrera profesional de los 1.405 trabajadores que tenemos”, subrayó Alberca, tras admitir la situación de “precariedad” que afecta a más del 70% de la plantilla local. El proceso afectará a los trabajadores temporales que cubren puestos estructurales y cuya dotación presupuestaria haya sido aprobada en los tres años anteriores a 31 de diciembre de 2017. Tras la aprobación en Pleno del plan de recursos humanos se abrirá una oferta de empleo público extraordinaria que será de concurso de méritos para el personal laboral indefinido (el más numeroso), para que pueda convertirse en laboral fijo, y concurso-oposición para que los funcionarios interinos puedan pasar a funcionarios de carrera. Tras dar estos pasos, quedará configurada la RPT definitiva y, al margen, en un proceso independiente, tendría que ponerse en marcha un proceso de promoción interna para que los empleados con condición de labores fijos opten a convertirse en funcionarios, aunque en esta situación solo se encuentra una decena de trabajadores del Ayuntamiento. Una funcionarización de quienes que ya tengan la condición de laborales fijos del Ayuntamiento que, según el edil, será “con una promoción interna, reglamentada, lo que permitirá dar mucho margen operativo y organización”.
Según Alberca, esta labor de consolidación no repercutirá en los costes laborales, pues es más una cuestión de reorganización del mapa de los recursos humanos de cara a su efectividad en el servicio público y su reconocimiento profesional. “Nos vemos obligados a bajar la cantidad de presupuesto que va a capítulo 1, de gasto de personal, y podemos hacerlo con el número de trabajadores que se van jubilando por tener un puesto que se tiene que extinguir o porque su puesto se puede cubrir con la reorganización”, agregó Alberca. Y la edil de Hacienda, María Orozco, reiteró que en este plan no se contemplan despidos. Y en la próxima Mesa General de Negociación abordará una oferta de empleo público de nueve plazas de Policía Local, con el objetivo de llegar a 180 agentes antes del final del mandato, frente a los 130 actuales, y otras tres para el Parque de Bomberos, dotado con 80 empleados, con la idea de que en 2023 sean 110 los operarios de este servicio.
En relación con el conflicto de Onda Jaén, Carlos Alberca dijo que el gobierno local espera tener la próxima semana una “hoja de ruta definitiva” con soluciones “viables y sostenibles”, admitiendo que entre las alternativas barajadas están la recolocación o reubicación de los empleados, pero sin despejar las dudas sobre la vuelta a la actividad de la televisión municipal. Ayer tarde, unas 500 personas, según la organización, se manifestaron por el restablecimiento de Onda Jaén en una protesta que contó con el respaldo de los sindicatos CSIF, CCOO y UGT, de grupos políticos y de vecinos y varios colectivos de la sociedad jiennense.
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