Doce integrantes de un clan han sido condenados por la Audiencia Provincial de Málaga a una pena global de 32 años de prisión por dedicarse a la venta y distribución de cocaína en Málaga.
Los acusados han sido condenados como autores de un delito contra la salud pública o por pertenencia a grupo criminal, así como tenencia ilícita de armas, según la sentencia, a la que ha tenido acceso Efe.
La Sala considera probado que los procesados estaban relacionados entre si por lazos familiares y de amistad y que se dedicaban, de común acuerdo, a la venta y distribución de cocaína; en ocasiones se las proporcionaban a otras personas, que, a su vez, las vendían por cuenta propia, y en otras, las vendían directamente.
Tres de ellos se encargaban de conseguir las partidas de cocaína de los proveedores, otros se ocupaban de la distribución, venta y cobro de las papelinas y algunos mantenían conversaciones para realizar las operaciones relacionadas con el tráfico de drogas y para evitar ser descubiertos utilizan un lenguaje figurado.
Entre los procesados, además de varios matrimonios también han sido condenados los hijos y primos de éstos.
Tras una decena de entradas y registros en domicilios, la policía se incautó de droga, numerosos móviles, dinero en metálico, útiles para el manejo de la cocaína, además de portátiles, cámaras de foto y vídeo, adquiridos con las ganancias obtenidas en el tráfico de drogas y usados para dicho negocio.
El tribunal, que también los ha condenado a pagar una multa global de 285.000 euros, ha acordado el comiso de la droga para su destrucción.
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