La calle Carretería y calle Álamos transformarán su imagen a partir del próximo año gracias a una inversión de más de 4 millones de euros procedente de los fondos europeos Feder. Se trata del proyecto con mayor cuantía prevista. En noviembre se arrancará la ronda de contactos con vecinos y colectivos de cara a consensuar la actuación que podría suponer la peatonalización con fórmulas para canalizar el tráfico.
En total, la capital recibirá 15 millones de euros, a los que hay que sumar la aportación del Ayuntamiento de Málaga de 3,75 millones con el objetivo de dar continuidad a la renovación urbana iniciada en 1994. La mayor parte de actuaciones se centrarán en el ámbito de los antiguos Arrabales, desde Ollerías hasta Lagunillas, en los barrios de la Trinidad, Perchel Norte y en la zona de El Ejido.
Se destinarán más de 600 mil euros para comenzar la rehabilitación del Mercado de Salamanca, se realizará un plan de señalética y digitalización de la Alcazaba y Gibralfaro, se acometerá la vía verde ciclista y senderista en el Guadalmedina, o se reactivará la Plaza de los Filipenses, entre otros. La mejora del transporte público y la movilidad sostenible es otro de los ejes, contemplando pequeños intercambiadores modales bus-bici y bus-buggie y un bus de alta capacidad del Centro al Palo, con una plataforma reservada que venga a paliar la falta del metro en la zona este.
En estos 22 años se han invertido unos 80 millones de euros para renovar el centro histórico, 60 de ellos de fondos comunitarios, pasando de 2 hectáreas peatonales a las 10 actuales, con actuaciones en espacios significativos como la calle Larios, la Plaza de la Constitución, la calle Andrés Pérez, la calle Strachan, la Plaza del Obispo, la Plaza del Siglo o, más recientemente, la calle Nosquera con el espacio para artesanos o los entornos del Museo de la Aduana o La Catedral. El Consistorio ha destacado la apuesta decidida por acometer proyectos de renovación urbana con un transfondo social.
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