El consejero de Economía y Conocimiento, Antonio Ramírez de Arellano, ha apuntado que una posible prórroga de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) es algo "malo para Andalucía", aunque ha rechazado que se generen "ni alarmismos ni indiferencias", de forma que cree que esa posible prórroga "no tiene por qué afectar a las cuentas andaluzas", aunque sí afecta la "falta de transparencia del Gobierno al no ofrecer datos de las entregas a cuenta, necesarios para elaborar las cuentas".
En comisión parlamentaria, el consejero ha rechazado las críticas del PP, que asegura que la presidenta de la Junta y secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, "impide que haya Gobierno de Rajoy, pero también impide a Pedro Sánchez formar Gobierno". Ante esto, Arellano ha indicado que Díaz "es importante en el partido, pero el PSOE tiene sus propios órganos de gobierno".
Considera que la situación actual "no es culpa de una sola persona" y es "algo poco apropiado culpar a una parte sobre lo que sucede políticamente" y ha hecho un llamamiento a la "responsabilidad", la "colaboración y al "diálogo" por parte del Gobierno central hacia las comunidades autónomas.
El consejero ha recordado que la elaboración de cualquier presupuesto a nivel nacional, autonómico o local "es un ejercicio de responsabilidad", tras lo que recuerda que Andalucía "tiene una actividad económica y dinámica presupuestaria diametralmente opuesta a la del Gobierno de España".
Ha recordado que anteriormente ya se ha llevado a cabo una prórroga de los presupuestos "y se sabe las consecuencias que tiene; fue la primera decisión del Gobierno con Rajoy al frente, junto con la mayor subida de impuestos, a pesar de que tuvo lugar en un contexto integral de constantes incumplimientos del Gobierno del PP, ejercicio tras ejercicio".
"Entonces no hubo problemas para prorrogar", ha apuntado el consejero, quien reconoce, no obstante, que un escenario de prórroga presupuestaria "no es el más idóneo, no es el correcto, pero tampoco es insalvable, pues no es la primera vez y no se va a paralizar un país como España ni sus comunidades autónomas".
Por tanto, considera que los mensajes "deben ser ponderados, ajustados a la realidad y alejados de intereses personalistas; ni se debe crear alarmismos ni calculada indiferencia".
Arellano ha hecho un llamamiento a la "responsabilidad" y a evitar que la falta de entendimiento "se traduzca en una merma de estabilidad, de la calidad de vida y de la igualdad de oportunidades".
Ha indicado que "se puede pensar que con la prórroga se pierde fuerza económica y se limitan posibilidades de inversión, pero si la idea para 2017 era establecer nuevos recortes para le economía, no será tan negativo, depende del cristal por donde se mire".
No obstante, sí reconoce que "la prórroga es mala para Andalucía, también para España", añadiendo que "también fue malo aprobar apresuradamente los presupuestos en 2015 para 2016".
"Si perpetuamos la receta del Gobierno del PP en sucesivos presupuestos, seguiremos sufriendo lo que padecemos en los últimos años, esto es, unos PGE que aumentan desequilibrios territoriales, por la insuficiencia del FCI, que se sitúa en mínimos históricos; que incumplen la disposición adicional tercera del Estatuto, pues se recibe menos dinero como inversión regionalizable".
De esta forma, con esos presupuestos "se mantiene los perjuicios para Andalucía, por lo que el trabajo de la Junta es minimizar los efectos que pudieran suceder en su caso, de manera que se procurará movilizar los recursos para dinamizar la economía en el ámbito de nuestras competencias".
Considera que "en este momento de dificultades económicas hace falta certidumbre", por lo que ha apelado a "la responsabilidad para que la situación sea asumible para todas las regiones".
En ese sentido, agrega que "la responsabilidad de la Junta es elaborar un presupuesto riguroso y creíble que responda a necesidades de los andaluces", y ha dejado claro que la prorroga "no debe afectar a los presupuestos de las comunidades autónomas", toda vez que "los datos de las entregas a cuenta pueden calcularse sin contar con los PGE".
Por tanto, considera que "si el Gobierno no nos ha facilitado esos datos es porque está actuando deliberadamente, no porque no pueda, el argumento de que está ligado a los presupuestos no es cierto", por lo que ha reiterado su exigencia de que el Gobierno central facilite esa información, puesto que "si no se ofrecen estos datos, se perjudican a las comunidades ocultando información". Ha reclamado por ello tanto "transparencia" como "lealtad institucional".
Arellano ha recordado que la Junta el pasado año "mostró capacidad de diálogo acordando los presupuestos con grupos parlamentarios, de forma que Andalucia fue la primera en tener presupuesto en 2016 y ahora prepara las cuentas para 2017".
"La situación es peculiar, con meses con un gobierno en funciones, y esa probable prorroga de presupuestos no debe ser obstáculo para que Andalucia disponga de un presupuesto de certidumbre", ha reiterado Ramírez de Arellano, quien insiste en "más colaboración y más dinámica de diálogo", frente lo que lamenta que el PP en sus años de Gobierno "no ha abordado cuestiones que se han quedado en el tintero, cuando podría haber buscado grandes acuerdos".
EFECTOS DE LA PRÓRROGA
Por su parte, el diputado del PP José Antonio Miranda ha pedido al PSOE "un ejercicio de responsabilidad", aunque ha lamentado la actitud de los socialistas, recordando que tras las elecciones del 20 de diciembre de 2015, donde "los ciudadanos dijeron que el partido mayoritario era el PP", el PP ofreció al PSOE "tanto una coalición, le pidió apoyo para que formara gobierno y que formara una oposición responsable".
"Un Gobierno de amplia base podría haber resuelto todos los retos de España, pero la respuesta del PSOE fue 18 veces no, Pedro Sánchez no quiso ni sentarse a hablar y el PSOE despreció la oferta de pacto", ha indicado Miranda, quien recuerda que se tuvieron que celebrar otras elecciones el 26 de junio "donde el PP sacó 14 diputados más y el PSOE fue castigado", y pese a lo cual "el PP volvió a ofrecer un pacto por España y se podría haber aprobado entonces los presupuestos, siendo rechazado de nuevo".
Miranda advierte de que unas terceras elecciones "supondrá daños a la economía española, porque no se podrían hacer nuevos presupuestos", algo que para Andalucía "tendrá consecuencias graves, con más recortes y ajustes de 2016 a 2018, pues no se podrá aprobar la nueva senda de consolidación fiscal más suave como pedía el PSOE".
Ello provocará, según indica Miranda, "que la Junta tendrá que recortar 600 millones en 2016 y ajustar 600 en 2017". Además las comunidades recibirán menos dinero a través del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), que no se puede aprobar.
Ha añadido que una prórroga presupuestaria provocará perjuicios económicos, que "haya menos pagos a las empresas; se congelarán pensiones y sueldos de los funcionarios y no se acometerán nuevas inversiones ni nuevos programas ni políticas sanitarias". Ha agregado que con esa prórroga "se mantendrá la tasa de reposición y no se podrá acometer las rebajas fiscales".
"Va a causar incertidumbre en presupuestos autonómicos y se va a retrasar la reforma del sistema de financiación y habrá sanciones de la UE por no tener los presupuestos ni enviar la senda de déficit", ha indicado Miranda, quien considera que todo esto "se puede evitar si se hace un ejercicio de responsabilidad, tanto el PSOE como la presidenta de la Junta, Susana Díaz, quien está impidiendo que gobierne Rajoy pero también impide que acceda al Gobierno su secretario general, Pedro Sánchez". "El PSOE pide diálogo pero dice muchas veces no", ironiza.
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