Casi la mitad de los chiringuitos andaluces seguirán, un verano más, sin regularizarse. En total, 400 de los 900 negocios de la comunidad permanecen en un limbo jurídico. En la provincia de Málaga, la más afectada, el problema pone en jaque a 176 establecimientos de playa. Una situación que estará solventada el próximo de mes de octubre, según prometió ayer el consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, José Fiscal, tras el encuentro mantenido con la Federación Andaluza de Empresarios de Playas en Málaga. Una visita en la que el titular destacó que “en los últimos meses le estamos dando un acelerón y se está avanzando bastante”.
Para cumplir este objetivo, el Gobierno andaluz ha reforzado el personal en las delegaciones territoriales de Málaga y Almería para agilizar la tramitación de las concesiones administrativas y ya estudia unificar los criterios para los modelos futuros de chiringuitos en la playa , tal y como reclama el sector. “Aunque haya cuestiones que dependan de los ayuntamientos, en lo que se refiera a la Junta es razonable hacer un esfuerzo de unificación de criterios, es lógico saber qué material se puede utilizar y cuál no, y que lo que se use en Málaga se pueda usar en Cádiz, Almería, Huelva o Granada”, explicó.
El presidente de Faeplayas, Norberto del Castillo, abogó por no “repetir errores del pasado” y aportar su “experiencia” para la normalización en un sector clave dentro del turismo. Un nuevo clima de diálogo que parece que por fin está dando sus frutos tras años de desavenencias que provocó que recientemente estuvieran a punto de iniciar acciones de protesta.
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