El onubense Miguel Ángel Medina (Lepe, 1980) ha pasado en dos semanas de estar cerca de dejar el tiro con arco por falta de ayudas a proclamarse este fin de semana subcampeón de España, un ejemplo más de lo duro que es sobrevivir llevando adelante un deporte minoritario.
Su historia es la de muchos deportistas que sobreviven sin un balón en los pies, porque han elegido una disciplina en la que no tienen a cientos de seguidores a sus espaldas, por lo que deben sobrevivir de sus propios ingresos para competir e incluso para lograr medallas en las competiciones.
Hace tan solo dos semanas, Miguel Ángel se enfrentaba al problema de no tener recursos para competir en las dos pruebas que tenía por delante: los Campeonatos de España y Andalucía de Tiro con Arco con Poleas, a los que tenía que rehusar por falta de recursos para desplazarse.
Tras plantearse su retirada, decidió acudir a un medio de comunicación para contar su historia y la respuesta fue superior a lo que esperaba: "En menos de 48 horas ya tenía patrocinadores y los apoyos para poder competir con garantías", ha explicado a Efe.
El complejo hotelero AMA Andalucía, que tiene sede en la zona costera onubense de Islantilla, se convirtió en su primer patrocinador, a los que siguieron varios, que aparte de la ayuda económico le ofrecieron otras, como el gimnasio Prado Sport, que lo acogió como deportista de elite para que use sus instalaciones sin ningún coste.
Días después de que su nombre saltase a los medios de comunicación, el Ayuntamiento de Lepe celebraba la gala del deporte local, en la que Medina fue homenajeado, todo ello con el vértigo que persigue a este soldador profesional que tiene que alternar su trabajo en Palos de la Frontera (Huelva) con la práctica del deporte para mantener su alto nivel.
Un nivel tal que ha provocado que haya conseguido la medalla de plata por equipos para Andalucía en el décimo Campeonato de España de Autonomías disputado en Cambrils (Tarragona) este fin de semana, mientras que una semana antes conseguía el bronce individual en el Andaluz.
A pesar de que su historia ha tenido un final feliz, no olvida que debe servir como llamamiento "a todas las personas que practican un deporte minoritario, para que crean siempre en la capacidad de llegar lejos, que luchen hasta poder llegar a conseguir sus logros".
"Hace dos semanas no podía ir a dos competiciones importantes en mi currículum deportivo por motivos económicos, hasta que tuve la idea de hablar con un periodista amigo al que le confíe mi situación, y terminé consiguiendo mis patrocinadores", señala este arquero, que recuerda que la lucha es continua, ya que su "nivel de tiro es realmente alto, pero por motivos de deterioro del material deportivo" no ha "llegado a conseguir mayores puntuaciones" de las que cree "que podría haber conseguido".
Miguel Ángel Medina fue campeón onubense de tiro con arco de poleas en 2013 y 2014 y reclamó la ayuda debido a que "tras haber estado mucho tiempo en desempleo" no podía "cubrir los gastos" y tiene "el riesgo" de quedarse "sin competir".
Ante la falta de ayudas, se quedaría sin lanzar sus flechas un hombre que lleva compitiendo cinco años en el tiro con arco de poleas.
Ha sido dos veces campeón de Huelva en sala 2013 y 2014, campeón de Huelva en aire libre en 2013, subcampeón en 2014 y tercero en 2015, así como campeón de la liga interna del club asirio en 2013 y 2015.
Ahora espera poder seguir compitiendo "y servir de ejemplo, porque hay deportes por los que merece la pena luchar y ayudar a atletas de alto nivel para representar nuestra tierra donde quiera que participemos, así que pido que haya más ayudas para nosotros que somos minoritarios, porque no solo hay fútbol en este mundo", sentencia.
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