Ángel Guerra regresó de Suiza en 1982 después de 15 años trabajando en el país helvético en una fábrica de carne y en la metalurgia. Sebastián López también trabajó en Suiza, en su caso fueron diez años y medio en la construcción y volvió a Huelva en 1979. Su trabajo allí les reportó una pensión pagada por Suiza, y ahora el Gobierno español les pide que tributen con carácter retroactivo esas pensiones, concretamente desde el ejercicio 2010.
Son dos ejemplos de los alrededor de 10.000 emigrantes retornados onubenses, y que han tenido que desembolsar un curioso pico antes del pasado 30 de junio. Ángel y Sebastián explican en Viva Huelva que hasta el pasado ejercicio de la declaración de la renta era a partir de 2013 cuando tenían que tributar sus pensiones del extranjero, pero en febrero de este año la medida se hizo retroactiva y han de declarar desde 2010. Ángel Guerra ya había pagado lo reclamado de 2013 en adelante, pero ahora, desde 2010, la broma de Hacienda, amparada por la reforma fiscal del Partido Popular, le va a costar unos 7.000 euros. Por su parte, Sebastián López ha tenido que abonar 8.800 euros. “Nos quitan el 21 %”.
En España, la ley fiscal marca que con dos pagadores (en su caso la pensión española y la del extranjero) habrá que hacer declaración de la renta si se supera el límite de 11.200 euros anuales, y de 22.000 si sólo se tiene un pagador. Y es ahí donde ellos quieren mostrar su rechazo, además de en lo apresurado de la medida: “Nos avisaron en febrero de este año y nos dieron apenas cinco meses para ponernos al día”, lamentan. “¿Por qué no nos ponen el tope de los 22.000 euros?”, se preguntan mientras recuerdan que “de golpe y porrazo hemos tenido que declarar cinco años y hay personas que se han muerto y se lo están reclamando a sus viudas o a sus herederos”. La fecha tope impuesta por Hacienda fue el pasado 30 de junio. Algunos han fraccionado el pago, pero “la mayoría lo hemos pagado por miedo a que nos embarguen o a tener que pagar más tarde con recargo”.
Además, Ángel Guerra muestra otra queja sobre la administración. Relata que acudió a la sede de Hacienda en la capital onubense, en el Paseo Santa Fe, “para que me hicieran la rectificación de la declaración de la renta, y me dijeron que eso en Huelva no lo hacían, que lo hiciera por internet o que fuera a Ayamonte, Aracena o La Palma. Me parece increíble”.
Con el propósito de presionar al Gobierno para que aumente el mínimo exigido a los emigrantes retornados jubilados hasta los 22.000 euros, y mostrar su rechazo a esta medida fiscal que les perjudica, los afectados se manifestarán este martes a partir de las 12.00 horas desde la Delegación de Hacienda de Huelva, haciendo un recorrido que acabará con la lectura de un manifiesto en la plaza de Las Monjas.
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