Tras las declaraciones realizadas esta semana por el alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix, sobre la situación de la Policía Local en el municipio, esta redacción ha hablado con un agente, que de manera muy crítica ha analizado su gestión y la del edil de Seguridad Ciudadana, Juan Manuel Ordóñez.
Este policía ha optado por mantener en el anonimato por el miedo a posibles represalias. Ha dejado patente la inseguridad que se puede dar en el municipio, donde en fines de semana y festivos (sin eventos) hay “entre 5 y 11 policías trabajando, frente a los entre 25 y 35 que en total trabajan cualquier día entre semana por la mañana”, cuando a los efectivos de seguridad ciudadana se suman los de oficinas, atención al público, subinespectores, educación vial….
“Hemos llegado a estar solo 5 policías en un fin de semana”. Esta situación crea en esos agentes, que tienen que cubrir todo el término municipal, en unas condiciones de servicios mínimos, una situación de estrés laboral e inseguridad extremas.
El agente, que asegura que su opinión es similar a la de otros muchos compañeros, lamenta que el alcalde haya comentado en alguna ocasión que las competencias de un policía local son “el tráfico y el cumplimiento de las ordenanzas municipales y no la seguridad de San Roque”.
Gestión “ineficiente”
Así de claro lo tiene este policía a la hora de describir al alcalde y al edil responsable de la Policía Local: “No tienen ni idea de lo que es la seguridad ciudadana”, lamenta.
Han sentado muy mal las declaraciones de Boix en las que presumía de haber retirado “privilegios” en el cuerpo, “cuando son derechos adquiridos en los últimos años y que él mismo aprobó siendo concejal de Hacienda y Personal en anteriores legislaturas” y apunta que si era ilegal, como sostiene ahora Boix, “tendría que haberlo denunciado”. Se refiere con ello, por ejemplo, a los turnos de trabajo de seis días seguidos y seis de libranza. “Es totalmente legal, porque uníamos las vacaciones y días de asuntos propios”.
Explica, además, que Ruiz Boix “ha dividido a la plantilla totalmente”, al crear unos turnos rotativos que benefician solo a la mitad de los efectivos.
Nuevo inspector
Llegará en 21015 y costará a las arcas municipales 80.000 euros anuales. “Sospechamos que existe un informe desfavorable de la Intervención, pero a pesar de ello se aprobó en pleno”, apunta. Pero lo peor es que “vendrá a poner orden y después se irá a su casa a cobrar su sueldo, y eso no hará aumentar la seguridad en San Roque”.
Por último, este agente muestra su sorpresa porque “no se entiende que un hombre tan justiciero como dice ser el alcalde, al policía implicado en la Operación Pulmón (presuntamente pasó información a traficantes), simplemente le ha abierto un expediente informativo, cuando en otros cuerpos de seguridad, se le habría suspendido de empleo y sueldo de manera fulminante hasta la celebración del juicio, para evitar que se repitiera el delito”. A otro agente, en cambio, supuestamente “le cambió el turno y le bajó el sueldo solo por unos comentarios personales en las redes sociales”.
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