El Ayuntamiento y la Peña Flamenca de Arcos se han unido para recuperar el Concurso de Saetas Ciudad de Arcos, que este año, tras varios en suspenso, celebra su cuarta edición. La peña ha querido dedicar el concurso, que tendrá lugar en una primera fase el próximo domingo en la propia peña del Barrio Bajo con entrada gratuita, a Nuestro Padre Jesús Nazareno y a las saeteras locales Juani y Leonor Rodríguez, hijas del difunto Latiguera.
La segunda fase del concurso, que será la gran final, se celebrará el domingo 11 de abril en el teatro Olivares Veas, con un precio de entrada de cinco euros. 32 cantaores de distintos puntos de Andalucía tomarán parte en el concurso, en el que la saeta autóctona de Arcos recobrará protagonismo. De hecho, numerosos cantaores foráneos han solicitado a la peña alguna grabación para conocer cómo se canta la saeta de Arcos, al más puro estilo de Cambayá, El Mochuelo, Latiguera, Soto o Zapata, entre otros.
Los cantaores foráneos interpretarán dos saetas libres y los arcenses lo harán con interpretación de saeta local, a la que se ha destinado un premio.
La presentación del concurso fue sujeta de un sencillo pero hermoso acto celebrado en la peña, la cual se engalanó para la ocasión con la decoración que registrará para la cita del domingo, luciendo una imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno y, como siempre, los iconos fotográficos de la entidad que relevan su larga historia, pues la peña fue fundada en 1972 en aquel vetusto local situado junto al molino de Algarrobo, en el Barrio Bajo. Hoy día la peña continúa su singladura en la plaza de La Caridad con un puñado de socios y buenos aficionados que luchan por su supervivencia.
El presidente de la peña, Pepe Álvarez, dejó constancia del enorme esfuerzo que ha tenido que realizar la entidad para organizar el concurso, pues la crisis ha pasado su particular factura al mundo flamenco; en este caso recortando considerablemente la cuantía de los premios.
Asimismo, el presidente agradeció a las hijas de Leonardo Rodríguez Latiguera la aceptación de la invitación, momento en el que ambas, muy emocionadas, manifestaron sentirse muy orgullosas de representar el nombre de su padre.
Asimismo, el presidete hizo un llamamiento a la juventud para que se interese por este palo flamenco, la saeta, “ya que de no ser así se perderá”. Manifestó que lo que más le ilusionaría sería convocar el año próximo un concurso de jóvenes cantaores de saeta.
Gracias a las gestiones llevadas a cabo, la participación será muy elevada en el IV Concurso de Saetas. Incluso se podría contar con la colaboración a última hora de la Diputación de Cádiz, según avanzó en el acto el alcalde, José Luis Núñez, acompañado de los delegados municipales de Fiestas y Urbanismo y de amigos de la peña flamenca.
Con todos estos ingredientes, Arcos recobra así su concurso de saetas, un auténtico símbolo de la Cuaresma en la ciudad y un magnífico escaparate del arte que atesora la localidad a la hora de cantar a Cristo y a sus misterios.
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