Según ha informado hoy la Guardia Civil en un comunicado, la investigación comenzó al tener conocimiento de una denuncia, presentada por un vecino de Sevilla ante la Policía Nacional, por una supuesta compra fraudulenta materializada en una tienda de muebles ubicada en Utrera.
En el transcurso de las investigaciones, la Guardia Civil recibió dos denuncias por hechos similares, además de otra de Málaga, otras dos de Sevilla y una de La Algaba (Sevilla), en las que se habla de contratos fraudulentos solicitando préstamos con diferentes entidades financieras, para lo cual se ha aportado documentación falsificada.
En todas ellas aparece como dato común un número de teléfono que corresponde al padre de uno de los detenidos, que, además de falsificar los DNI de las víctimas, presentaban certificados de ingresos del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) falseados en el importe que cobraban o el estado social, e incluso hacen constar una pensión de viudedad a personas que no lo son.
En su "modus operandi", los detenidos hacían constar en los contratos de financiación, domicilios y teléfonos erróneos para que transcurriese el mayor tiempo posible antes de que las víctimas y entidades financieras se percatasen del delito, para evitar que estas últimas se pudieran poner en contacto con los denunciantes.
Tras conseguir las pruebas pertinentes, la Guardia Civil detiene a estas dos personas como presuntos autores de cinco delitos de estafa, 18 delitos de falsedad documental (documento público y documento mercantil) y ocho delitos de usurpación de identidad, a los que atribuye una estafa por valor de más de 80.000 euros.
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