Aunque la pérdida de un ser querido tiene un valor incalculable, su entierro o incineración si tienen un precio. Y este oscila entre dónde sale más caro, Madrid y dónde más barato, Murcia, si atendemos al estudio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en 30 capitales de provincia españolas.
Así, en Málaga, el precio del servicio funerario de la inhumación se sitúa en 551 euros, por debajo de la media nacional, que está en 668 euros, aunque, en el caso de la cremación, cuyo coste es de 802 euros, si está por encima de lo que se paga como media a nivel nacional, 612 euros, según el citado estudio de la OCU.
Si analizamos los datos andaluces ofrecidos por la organización consumerista, Málaga se encuentra situada en la mitad, ya que la provincia más cara es Granada con un coste de 814 euros para el enterramiento y 968 para la incineración, seguida de Cádiz con 705 y 818 euros respectivamente; por debajo de Málaga, según los datos aportados por la OCU se sitúan Córdoba, donde una inhumación sale por 481 euros y una cremación por 518, y Sevilla, con 363 y 227 euros, respectivamente.
¿Quién tiene el top? En lo más alto del coste por los servicios para dar un final digno a los seres queridos se sitúa Madrid donde en el caso de un entierro sale por 2.035 euros y de una cremación por 931.
Detrás de Madrid se sitúa Valladolid donde una inhumación cuesta 1.457 y una cremación 1.028. En el otro extremo, es en Murcia donde cuesta menos que te den sepultura, 74 euros, y en A Coruña donde te reduzcan a cenizas, 225 euros.
Pero no todo es el coste del enterramiento o la incineración. OCU destaca que los importes son muy variables, pero también lo son los servicios incluidos en el coste: desde el ataúd, a las flores, pasando por el coste de la inhumación o cremación y el tanatorio. Así, su detallado estudio permite cifrar el coste medio de los servicios funerarios en más de 3.700 euros (pero en algunos lugares, como Madrid, supera fácilmente los 5.000 euros).
De los costes del servicio funerario el féretro, arca o ataúd es el apartado más caro: un modelo común, sin lujos especiales, cuesta entre 600 y 1.300 euros, pero la media ronda unos 1.200 euros.
El precio del cementerio marca diferencias: desde la inhumación a las tasas por el alquiler, la media puede suponer más de 660 euros. La incineración, cuando se opta por ella, es más económica, poco más de 600 euros de media.
El alquiler de tanatorio también supera los 500 euros, y a eso hay que sumar otros gastos: esquelas, flores, el coche fúnebre, la preparación del cuerpo, los gastos de personal...tienen cuantía muy variable, pero una corona mediana supera los 100 euros.
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