Los detallistas del Mercado de Abastos han tenido la oportunidad de conocer de primera mano el proyecto básico de rehabilitación del inmueble, en un encuentro mantenido en el Palacio municipal con la alcaldesa de Sanlúcar, Irene García, y cuyas obras está previsto que comiencen en octubre de este mismo año.
El equipo redactor del proyecto, ‘Beuve’, explicó con detalle los pormenores de una actuación relevante que convertirá el vetusto mercado en un edifico singular, accesible y extraordinario para un servicio de este tipo. El proyecto fue analizado por su redactores “desde el punto de vista antropológico, arqueológico, histórico y arquitectónico y urbanístico para justificar las decisiones adoptadas para mejorar el Mercado Central de Abastos de Sanlúcar y su relación con el entorno de la ciudad”.
En este sentido, señalaron que en la confección del proyecto de rehabilitación se ha conjugado tanto el interés de los consumidores y de la propia ciudad como el de los propios comerciantes a la hora de adoptar decisiones sobre esta actuación urbanística para lograr el máximo beneficio para todos.
Entre las peculiaridades de esta actuación, destaca que uno de los elementos arquitectónicos más relevantes de la zona, un edificio de arquitectura civil único en España, como son Las Covachas, cobrará especial protagonismo en una plaza que contará con una cafetería y que servirá como principal acceso al mercado desde el Barrio Alto. De esta manera se consolidará la plaza de Las Covachas como un nuevo elemento de atracción turística y un lugar de fácil acceso a la plaza.
Precisamente, la accesibilidad es uno de los objetivos de la rehabilitación del Mercado como elemento de conexión entre los barrios Alto y Bajo. Así, además de a través de la mencionada plaza, se accederá por la Cuesta de Belén sin solución de continuidad, es decir sin ningún tipo de escalera o rampa, al mercado. Además, en consonancia con la totalidad del mismo, que se caracterizará por ser diáfano y luminoso, una mampara transparente separará a la plaza de abastos de la Cuesta de Belén, desde donde se podrá observar toda la actividad de su interior, que aprovechará la luminosidad del exterior.
Por otro lado, la portada de piedra del siglo XVIII que ofrece una de las entradas por la Cuesta de Belén será trasladada a la calle Trascuesta, por donde se podrá acceder al mercado casi desde la calle Carmen Viejo, facilitando el flujo de personas por los diferentes accesos y el interior del mercado. Además, con esta solución, en la zona de Trascuesta se mantendrá la actividad comercial con puestos en la calle.
En la futura plaza se situarán, a la altura de la plaza de Las Covachas, los puestos de pescado, y en una planta superior, a la que se podrá acceder mediante una escalera o por escalerillas mecánicas, se situarán los puestos de carne y de verduras, así como una zona de servicios comunes con las dependencias administrativas propias del mercado de abastos. En la planta sótano los comerciantes contarán con almacén y cámaras frigoríficas, y se habilitará un muelle de carga y descarga con montacargas que conectarán con las plantas superiores, así como espacios para depositar los residuos. Los puestos serán, según el proyecto tipo diseñado por el equipo técnico, de dimensiones similares a las actuales, pero con características adecuadas al tipo de venta que se efectúa en función de si se trata de carnicería, pescadería o verduras, y contarán con conexiones telefónicas e incluso internet. En la planta superior se habilitará una terraza mirador, en la que se podrá instalar una cafetería, que podría estar en funcionamiento de manera independiente a los horarios del mercado, lo que supondrá un nuevo atractivo más para la zona. En definitiva, el futuro edificio de la plaza de abastos se presenta como “un espacio diáfano, muy accesible, atractivo, y funcional”.
DIÁLOGO
Tras la explicación de esta actuación, la alcaldesa señaló a los comerciantes que llenaron el Salón Rojo del Palacio municipal que se trata de un proyecto básico al que “hay que darle aún muchas pinceladas”. Irene García quiso tranquilizar así a los detallistas, a los que afirmó que la pretensión del Ayuntamiento es mejorar las condiciones de los comerciantes, y de hecho anunció que se creará una comisión de seguimiento con representación de los propios detallistas y del Ayuntamiento en la que se abordará, una vez concluido el proyecto, el traslado provisional del mercado mientras se desarrollan las obras.
Además, dijo que el Ayuntamiento hará todo lo posible para intentar garantizar la vuelta de los comerciantes actuales al mercado valorando su antigüedad y que se trabajará para que todos, los actuales y los que se sumen en un futuro, lo hagan en las mismas condiciones. “Ahora es cuando todos tenemos que empezar a trabajar”, subrayó la alcaldesa.
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