La enfermera hospitalizada en Málaga con coronavirus que dio a luz tras someterse a una cesárea de urgencia ha mejorado su evolución clínica hasta el punto de serle retirada la respiración asistida invasiva (entubación), aunque permanece en estado grave en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
Fuentes cercanas al caso han informado este martes a Efe de la evolución de la paciente, sometida a cesárea a las 27 semanas de gestación y que dio a luz a una niña de 1,2 kilogramos de peso; un bebé prematuro que, a su vez, resultó negativo por coronavirus en una primera prueba.
La mujer de 33 años, enfermera en un centro de salud de la capital malagueña, dio positivo por coronavirus cuando estaba de baja laboral e ingresó en el Hospital Regional de Málaga, desde donde fue trasladada al Materno Infantil, donde el pasado 15 de marzo, al empeorar su estado, se le practicó la cesárea.
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