La Universidad de Jaén (UJA) está de cumpleaños. Este 2018 sopla las velas de su 25º aniversario fundacional y ha arrancado el año con un programa de actividades que involucrará a toda la comunidad educativa y a la sociedad jienense.
Precisamente el presente mes de enero está dedicado al ‘capital humano’ de la Universidad jienense y este martes se celebra un acto de reconocimiento al profesorado y el personal de Administración y Servicios que llevan un cuarto de siglo en la institución académica. Será en el Aula Magna del campus de Las Lagunillas.
El 1 de julio de 2018 se cumplirán 25 años de la publicación en el BOE de la ley de creación de la Universidad de Jaén y en estas páginas, investigadores, jefes de servicio, técnicos, profesores, directores de centros y catedráticos de la institución recuerdan qué estaban haciendo allá por 1993, cuáles eran sus expectativas, la evolución de la Universidad jienense y los retos que quedan por delante.
Entre el capital humano de la UJA que este martes será homenajeado está Alfonso Chico, jefe del servicio de Gestión Académica. Tenía 23 años y era funcionario de la Universidad de Granada, destinado en la facultad de Ciencias Sociales. “Pude optar por irme a Granada, pero decidí quedarme en mi tierra, junto a las personas que me estaban ayudando a crecer personal y profesionalmente, y aportar mi granito de arena en la construcción de la Universidad”, recuerda. Alfonso Chico señala “la cercanía y capacidad de adaptación y respuesta” como las ventajas de una Universidad con las dimensiones de las de Jaén. Considera que la sociedad está “orgullosa” de su Universidad, a la que aún le queda retos por delante como “buscar mecanismos para que la estructura administrativa se adapte con mayor rapidez a los cambios”.
El director del Secretariado de Acceso a la UJA y profesor del departamento de Matemáticas Antonio Damas impartía clases en el entonces Colegio Universitario de Jaén. “Desde que era estudiante de la Licenciatura de Matemáticas en la Universidad de Granada, mi deseo era ser profesor de Universidad. Mi objetivo fue siempre residir cerca de mi familia y he podido seguir viviendo en Torredonjimeno. Me trasladé a Jaén en 1988, después de un año en el campus universitario de Almería, y comencé a dar clases en la entonces Escuela de Empresariales”, recuerda. En cuanto a la evolución de la UJA en estos 25 años, Antonio Damas destaca el “enorme crecimiento del campus de Las Lagunillas”, pero también la “consolidación de una amplia oferta académica de Grados, Másteres y Doctorados”. Igualmente, señala la “investigación” y su “relevancia internacional” como uno de los avances que la sociedad empieza a reconocer a la institución universitaria. Entre las prioridades de la Universidad del futuro, apunta a la “inserción laboral de los egresados”, aplaudiendo el aumento de la oferta de prácticas de empresas que se ha producido en los últimos años.
La directora de Secretariado de Becas, Ayudas y Atención al Estudiante, la profesora titular de Química Orgánica María Luisa Quijano obtuvo su plaza de titular de Universidad en el área de Química Orgánica en 1993. “Tanto la actividad investigadora que me permitió ser doctora en Farmacia, como mi labor docente, han estado siempre ligadas al campus de Las lagunillas”, confirma Quijano. Profesionalmente ha crecido con la UJA. “La evolución de la Universidad ha sido espectacular en estos 25 años. Yo me siento parte de un proyecto sólido y siempre joven como es la Universidad de Jaén”, afirma.
Señala la “ilusión” y el “empuje”, además del “mayor contacto con la realidad social que incita a la reflexión y a la búsqueda de respuestas adaptadas a las necesidades del entorno” como las virtudes de una Universidad joven. El reto de los próximos años es “seguir trabajando por el crecimiento de la Universidad a todos los niveles” y continuar “con la búsqueda de la calidad y de la excelencia académica e investigadora”.
Luis Guerrero es Técnico Especialista en Medios Audiovisuales, adscrito al Servicio Central de Informática, y comenzó a trabajar en 1989, cuando aún era campus universitario de la Universidad de Granada. Recuerda los primeros tiempos como “años llenos de expectativas, trabajo, decisiones y sobre todo muy ilusionantes”. Entró realizando tareas de limpieza y las prioridades de entonces era su promoción profesional. Puntúa la evolución de la UJA con un notable. “Podemos mirar atrás y sentirnos orgullosos de nuestra Universidad y lo que se ha conseguido a día de hoy. Podemos mirar a otras universidades sin complejos”. Luis Guerrero ha paso la mitad de su vida en la Universidad de Jaén. “He conocido, he trabajado y tengo amistad con personas que me han aportado mucho personal y profesionalmente”, afirma.
El director del Centro de Estudios Avanzados en Lenguas Modernas, Antonio Bueno, será homenajeado y obtendrá un reconocimiento por recibir la mejor valoración de sus prácticas docentes por parte del alumnado, en el curso 2014-2015 (premio buenas prácticas docentes). Se incorporó en el curso 1989-1990 y reconoce que, desde entonces, la evolución de la Universidad ha sido “en todos los sentidos”. Desde la oferta de titulaciones a la creación de facultades, grupos de investigación, líneas estratégicas para Jaén y su provincia… Antonio Bueno pasó a ser profesorado junto al equipo de profesores que lo formó a él y recuerda su incorporación como uno de los momentos “más ilusionantes”. Fue decano de la Facultad de Humanidades y se ha implicado con los tres equipos de dirección en la gestión universitaria. Para Antonio Bueno, el reto de la UJA para los próximos años es “adaptar las titulaciones a las necesidades actuales y futuras, ser cada vez más un punto de referencia en investigación con proyectos internacionales, continuar con la dimensión internacional a través de los programas de movilidad de docentes y alumnado, y ser una universidad universal para todos”.
Lina Vico es Técnica Especialista en Biblioteca, encargada de equipo. Trabajar en cuestiones de calidad, implementando nuevas formas de trabajo, “más participativo y con una orientación muy marcada hacia el usuario” han sido algunos de los momentos más importantes que ha vivido siendo parte del equipo de la UJA. “Trabajar en la Universidad ha supuesto una oportunidad de participar e implicarme en el proyecto más importante que ha tenido esta provincia”, afirma. Sobre las dimensiones de la UJA, Lina Vico reconoce que la hacen “una institución ágil, con facilidad para asumir cambios”. Igualmente, Vico asegura que la sociedad ve a la Universidad como “impulsora de innovación e investigación”.
Macario Cámara de la Fuente es director del departamento de Economía Financiera y Contabilidad desde hace ocho años y se incorporó a la Escuela Universitaria de Estudios Empresariales en 1981. Llegó al campus universitario en 1991 y desde entonces ha sido testigo de la creación, el crecimiento y la evolución de la institución universitaria desde su seno. Ha formado parte del equipo de Gobierno de la Universidad, convirtiéndose en director de Secretariado del Vicerrectorado de Estudiantes y Profesorado. “La sociedad está orgullosa de su Universidad porque se ha dado cuenta del gran valor que representa para la formación de su gente”, dice. El catedrático reconoce que aún queda por “consolidar la política de personal para responder mejor a la atención de las distintas áreas de conocimiento, para que la docencia ocupe un papel importante y para que el personal tenga posibilidades reales de conseguir su meta académica”. Igualmente, aconseja “dar una vuelta” a la oferta de estudios de la UJA para ver “cuáles son más atractivos, tanto por su empleabilidad como por su demanda social”.
La encargada del equipo de Conserjerías en el Rectorado de la UJA, Amadora Marín, también será reconocida. De sus inicios, recuerda la “fuerza, ganas y experiencia” para adaptarse a las nuevas exigencias de la Universidad que estaba naciendo. Ella, como muchos jienenses, fue de las que salió a la calle para manifestarse y pedir una Universidad para Jaén. Hoy, 25 años después, Amadora Marín reconoce que “lo que verdaderamente muestra un camino hacia la excelencia es tener conciencia de lo que ahora existe, de lo que se ha conseguido y lo que se pretende alcanzar, con la ilusión y el esfuerzo de todos”. Afirma que es de las que dice orgullosa: “Trabajo en la Universidad de Jaén”. Nunca se sentirá satisfecha y afirma que “queda mucho por hacer”, señalando la implantación, por ejemplo, del Grado de Medicina “en cuanto sea posible educativa y económicamente”.
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