Verdemar denuncia el "catálogo de horrores" tras la poda en La Línea

Ecologistas en Acción señala el "mal trabajo" realizado por los jardineros en varios puntos del municipio

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  • Un ejemplo de la poda. -

Verdemar Ecologistas en Acción señala "la mala poda" que se está realizando en la Avda. Vía Parque, la esquina de la calle Los Lirios y la esquina de la Avda. Maria Guerrero, en el municipio de La Línea de la Concepción. Entre los ejemplares de árboles sobre los que se han acometido estás "malas prácticas de poda" citan los morales, frutales, entre otros. 

"Que más bien poda parece un ensañamiento contra ellos", han destacado en un comunicado. "La poda se realiza a trasmocho, en algunos casos queda desfigurado el árbol en su forma natural. Quedando además el conjunto feo y desgraciadamente desolado".

Los ecologistas detallan que en estos meses de inviernos, época de la poda, y en La Línea "el hacha y motosierra no desmerecen en nada a los mejores éxitos del cine gore vegetal". Así, el "catálogo de horrores" que queda tras el paso de muchas cuadrillas "de llamados 'jardineros'" son árboles mutilados, con el tronco desmochado, desprovistos de casi todas sus ramas y, muchas veces, reducidos a una especie de candelabro fúnebre; un simple fuste con tres cortos muñones, sin dejar algunas ramas primarias, secundarias e incluso terciarias, especifican en la nota enviada. 

"La escena se ha hecho tan abundante que, incluso, parece normal", denuncian desde Verdemar. De hecho, son muchos los ciudadanos que creen que es necesario podar los árboles urbanos, que éstos agradecen el corte drástico de ramas y troncos y que, incluso, crecen mejor gracias a ello. Pero no es así, los árboles no necesitan podas. Por el contrario, sufren, se debilitan, enferman y mueren por ese manejo. "Esta costumbre errónea deja un legado patético: árboles feos, contrahechos y que no dan los servicios que requerimos de ellos, como la sombra o la belleza".

Según Luciano Labajos, recuerdan desde Verdemar Ecologistas en Acción, jardinero y maestro de jardineros, lleva décadas trabajando en parques madrileños y ha publicado varios manuales sobre el oficio, también es miembro de su asociación, y que coincide en el hecho de que la poda "no es algo que necesiten los árboles". El explica como "fisiológicamente el árbol no requiere poda. Lleva millones de años evolucionando sin nosotros y se defiende solo. En un bosque hay unas podas naturales. Si hay mucha sombra el árbol elimina ramas, y también se pierden otras por las heladas o la presión de los herbívoros en zonas no urbanas". 

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