Con la opinión de Isidoro Moreno, catedrático emérito de Antropología de la Universidad de Sevilla, acerca de los muy variados asuntos que deambulan por este pobrecito país y más concretamente por Andalucía, y reflejada en distintos medios andaluces, es rara la vez que haya estado en desacuerdo; probablemente, en ninguna ocasión. Y es que la visión y el rigor analítico que Isidoro aplica a cada cuestión que planea, sobre todo, por esta humilde y riquísima tierra verde, blanca y verde, son de un diagnóstico certero y valiente que, estoy seguro, en ocasiones a más de uno y de una incomoda..
Ya, desde su firma en la revista de los setenta “Torneo” –publicación ligada al PTE y cuya distribución en Huelva era llevada a cabo por un tal Jesús Conde y el compañero Martín- la figura y el nombre de Isidoro Moreno eran una referencia clara para quienes como un servidor trataba de apuntalar con la palabra determinados aspectos de nuestra geografía andaluza, vilmente pisoteada por los que todos conocemos. Así que, desde aquella época sigo con fervor de alumno cuanto de interesante, que es prácticamente todo, saca a la luz el amigo Isidoro.
Y tiene su razón de ser todo este preámbulo, porque vuelvo a coincidir con Isidoro Moreno en la reflexión que hace en un diario sevillano sobre la visita que Barack Obama va a realizar a Híspalis, y que tiene al casco histórico de la ciudad patas arriba. Como bien dice Isidoro: “Obama no viene de turismo. Viene a visitar sus posesiones de Rota y Morón, a las que ya ni se les da el engañoso nombre de “bases de utilización conjunta”: son bases de la OTAN, con mando norteamericano, para la intervención en guerras en África y Oriente Medio”.
Pues, naturalmente. ¿O es que creían ustedes que el yanqui mayor iba a dejarse caer por estos lugares para darse un chapuzón en las cristalinas aguas de Punta Umbría o Mazagón? ¿O creían, acaso, que el mayor de los yanquis haría una performance en la Alameda de Hércules, canturreando por Pavón y enarbolando la bandera del quejío?... El yanqui, señores, viene a lo que viene: a comprobar “in situ” si el escudo antimisiles instalado en Rota está en su sitio, o siAfricom (dispositivo para intervenciones rápidas en África) se encuentra en perfecto estado de revista en Morón de la Frontera. Ni más, ni menos.
Y todo ello, en medio de un desgobierno absoluto en España. Y apunta Isidoro Moreno: “También viene a presionar, al igual que ha hecho en diversos países europeos, para que el TTIP, el Tratado entre la Unión Europea y Estados Unidos que se está negociando de forma opaca, sea aprobado rápidamente sin organizar referéndum y ni siquiera debate parlamentario”. Ya ven, amigos. Mientras algunos y algunas engrasan sus posaderas, yo escribo en una pared de mi barrio: Yankee go home!
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