La Virgen de la Bella permanecerá este año una semana más en su ermita tras la finalización de la Romería que en honor de la Patrona de Lepe se celebrará como es tradicional en el mes de mayo.
Es una de las novedades que este año presentará la romería lepera, con motivo de las celebraciones de su cincuentenario, según ha indicado la hermandad en un comunicado de prensa.
En el mismo se informa que su Junta de Gobierno ha recibido recientemente la autorización por parte de la Delegación Diocesana de Hermandades y Cofradías del Obispado de Huelva para la celebración de los cultos extraordinarios a celebrar con motivo del 50 Aniversario de la Romería en honor a Nuestra Señora de la Bella.
La celebración de estos cultos, que abarcarán los días posteriores a la terminación de la Romería de la Bella 2016, motivará la ampliación de la estancia de la imagen de la Virgen en su ermita hasta el domingo siguiente a la conclusión de la fiesta, concretamente el Domingo de Romería Chica. Por contra, no supondrá la ampliación de la Romería, la cual finalizará el lunes 9 de mayo.
Por ello, prosigue la hermandad, la Romería del presente año “contará un final extraordinario”, finalizando la misma con una procesión de la Virgen por la calles del recinto romero en la tarde del lunes, 9 de mayo, concluyendo la misma con la entrada de la Patrona lepera nuevamente en su ermita.
En concreto, los cultos extraordinarios programados a celebrar serán principalmente los días 11, 12 y 13 de mayo, con la celebración a las 21.30 horas de un solemne triduo extraordinario conmemorativo del cincuentenario. El sábado, 14 de mayo, se celebrará a las 21.00 horas una solemne función extraordinaria igualmente conmemorativa del cincuentenario.
Ya en la jornada del domingo, 15 de mayo, a las 18.00 horas se iniciará el camino de regreso de la Virgen de la Bella a Lepe.
Según ha indicado la Junta de Gobierno de la hermandad, “los devotos de la Virgen de la Bella estamos de enhorabuena de tener la oportunidad de vivir una vez más, y con motivo de estas efemérides, unos días de fervor, gozo, júbilo y alegría, en torno a Nuestra Excelsa Madre. Por este motivo pedimos a todos los devotos de la Virgen, que el tiempo que resta hasta la celebración de nuestra Romería y de estos cultos extraordinarios, sea un periodo de preparación, no sólo material, sino también espiritual, para mejor provecho y disfrute de estas jornadas”.
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