Hoy (24 de marzo) hace 137 años, Robert Koch, anuncio al mundo la principal bacteria causante de la tuberculosis, la Mycobacterium tuberculosis.
Es la segunda mayor causa de muerte y la enfermedad infecciosa más presente en el mundo. Su forma latente (forma inactivada: la que no presenta síntomas) la padecen el 33% de la población mundial. Según datos de la OMS, en 2016, 10,4 millones de personas enfermaron de tuberculosis y 1,7 millones murieron por esta enfermedad (Más del 95% en países de ingresos bajos y medianos). España y Portugal son los que tienen más casos de infección per cápita de toda Europa.
La tuberculosis es una infección (que puede pasar a enfermedad) que afecta principalmente a los pulmones, ya que se contagia por el aire. Después se va extendiendo a las diferentes partes del cuerpo.
Los síntomas de la enfermedad son: fiebre, sudores nocturnos, pérdida de peso repentina, tos crónica y escupir sangre. Para averiguar si tienes la enfermedad el médico ha de hacer una radiología, un análisis de sangre y una prueba de tuberculina cutánea.
Personas que tienen debilitado su sistema inmunitario, como drogadictos y enfermos de SIDA son los que más posibilidades tienen de padecerla. La automedicación con medicamentos inmunosupresores también puede debilitar el sistema inmune. Si tienes la infección en su forma latente se puede reactivar contrayendo el VIH o con medicamentos para la artritis.
Encontrar un tratamiento eficaz de la tuberculosis ha sido siempre un reto; antiguamente en el siglo XIX el tratamiento consistía en aumentar el flujo sanguíneo en los pulmones a través de una taquicardia inducida (se desconoce su eficacia); más tarde se utilizaron técnicas basadas en colapsoterapia que trataban en colapsar los pulmones para que permanecieran en reposo y que el sistema inmune acabara con la enfermedad. En 1950 se empezaron a utilizar antibióticos para controlar la enfermedad y no avanzara (se siguen utilizando). Dependiendo de su eficacia y de los efectos secundarios de los fármacos, se clasifican en fármacos de 2ª línea (los mejores) y de 1ª línea.
Un problema bastante grave es que están apareciendo cepas de bacterias resistentes a los antibióticos. Dependiendo de la mutación se diferencia entre bacterias multirresistentes (inmunes a algunos fármacos) y bacterias ultrarresistentes (resistentes a todos los fármacos de 1ª línea y a uno de 2ª línea).
Cada vez hay menos muertes por tuberculosis debido a las mejoras en nuestra calidad de vida, sin embargo aumentan los casos de fallecimientos por bacterias multirresistentes (en 2012 hubo 450.000) Debido a ello, a que principalmente afecta a países pobres y el coste de los nuevos tratamientos es muy alto y al poco compromiso político, está siendo bastante complicado controlar y erradicar por completo una de las enfermedades infecciosas más mortales que nos afectan.
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Alumnos del IES La Atalaya participan con sus trabajos con el periódico Viva Conil divulgando sobre ciencia y otros temas importantes en su realidad cotidiana. En esta ocasión por ha sido redactado por Biel Scammell Sánchez-Blanco (3º ESO B).
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