Tres años después de su fallecimiento, Ramón Blanco está más presente que nunca en las instalaciones de El Rosal. El nombre del que fuera jugador y entrenador cadista en varias etapas figurará para siempre en la ciudad deportiva del equipo amarillo, el color de sus amores.
El legado de Ramón Blanco, que también siguió al equipo como informador deportivo durante varias temporadas, permanecerá para siempre al haberse bautizado con su nombre al campo principal de las instalaciones deportivas de El Rosal.
En un emotivo acto se descubrió la placa que así lo atestigua. Y se hizo ante la presencia de numerosas caras del cadismo, estando la entidad representada por el presidente, Manuel Vizcaíno, además de por Álvaro Cervera y Servando, entrenador y capitán respectivamente.
La familia de Ramón Blanco también estuvo presente en este momento tan emotivo y la placa fue descubierta por su esposa y su hija. Fue precisamente Vanesa Blanco la que ofreció unas palabras de agradecimiento “al club y a todos los que muestran cada día su cariño por Ramón”.
“Él tenía el corazón amarillo y azul y se marchó feliz, porque estaba donde quiso estar”, explicó la hija de Ramón Blanco antes de pasar la palabra a Vizcaíno.
El presidente cerró el acto indicando que “Ramón es historia del Cádiz y se perpetúa donde el equipo entrena y se forman nuestros jugadores de las secciones inferiores”.
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