Jerez ya vive de lleno sus Fiestas de la Vendimia con el permiso, eso sí, de un acto tan tradicional y único a la vez como el nacimiento del nuevo mosto en Jerez. Un año más, el acto de la Pisa de la Uva a las puertas de la Catedral fue el encargado de cortar la cinta inaugural de este ciclo festivo, que se prolongará hasta el próximo domingo con una nutrida agenda de actos, a la que ayer se sumó también la inauguración de la IV Feria Gastronómica en la Alameda Vieja.
Pero primero vayamos al protocolo. El acto propiamente dicho apenas duró media hora, congregó a un buen número de jerezanos, que luego no tuvieron problema en degustar el vino “recién nacido” y comenzó a las ocho bajo los acordes de la Banda Municipal de Música de la pieza “Campos Jerezanos”, como no podía ser de otra manera.
Después, llegó el momento para las vendimiadoras de trasladar los racimos al lagar y, para el deán de la Catedral, de bendecir, primero la uva y, luego, el nuevo mosto recién salido por la piquera en una recreación fiel al formato de siempre en la que no faltaron ni los pisadores ni los arrumbadores. Los aplausos, primero, y los himnos de Andalucía y de España, celebraron el “feliz alumbramiento”.
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