La Policía ya investiga lo que se supone es un nuevo fraude a los ciudadanos. Este se produce cuando llega al correo una carta con membrete del Ayuntamiento de Jaén informando que ha habido un retraso en el pago del Impuesto de Bienes Inmuebles Urbanos (IBI), donde se adjunta el propio recibo personal y además invitan a realizar el pago, con una penalización de 200 euros, en las oficinas del Ayuntamiento de Jaén o en las de la Diputación Provincial. Las dos administraciones han denunciado los hechos que aseguran que son muy perjudiciales. Además de por la estafa en sí, preocupa cómo se ha podido acceder al documento de pago del IBI y cómo se ha tenido conocimiento de que había un retraso. Desde el Ayuntamiento han aclarado además que si reciben una notificación de este tipo se pasen por el servicio de Gestión y Recaudación de Ayuntamiento situado en la calle Obispo González donde les asesorarán. Además han explicado que cuando un ciudadano no pagara en tiempo y forma el recibo se inicia un expediente y se envían las notificaciones para que realice el pago en otros plazos.
Enfrentamiento
A raíz de esta estafa, el Ayuntamiento apuntaba como curioso que en el documento se decía que se podía hacer el pago en las oficinas de recaudación de la Diputación. Declaraciones calificadas de tendenciosas por la Diputación, que pedía mayor responsabilidad para detectar cuanto antes quién o quienes están detrás de los hechos.
Aqualia
Aqualia ha informado de que han detectado llamadas concertando visitas a domicilios en las que, alegando presuntos problemas de calidad del agua, les instan a comprar unos mecanismos de ósmosis.
En la visita les realizan in situ una demostración en la que, mediante una prueba química engañosa que realizan con un aparato, el agua del grifo se vuelve oscura. Desde aqualia han insistido en que el agua de los grifos está regulada por un exhaustivo control sanitario que la certifica y esto es un engaño.
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