El Ayuntamiento de Sevilla da el paso y abre la posibilidad de seguir el desarrollo de los plenos municipales, vía streaming, a través de la página web municipal www.sevilla.org, una medida que ya había sido solicitada en varias ocasiones y que, por fin, comenzará a ser una realidad en la sesión ordinaria de este mismo viernes.
“Transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno”, decían las fuentes municipales que han confirmado a Efe esta retransmisión vía internet para justificar la medida implantada por Juan Ignacio Zoido dentro de su estrategia por acercarse a los ciudadanos y reducir esa brecha que los separa del político. También se encargaba el propio alcalde de confirmarlo en su cuenta de la red social Twitter y de reproducirlo el Ayuntamiento en la página de Facebook.
Los plenos municipales se graban a través de un sistema de cámaras que hasta ahora operaba por circuito interno y que ofrecía las imágenes en las pantallas instaladas en el Salón Colón del Ayuntamiento de Sevilla. Ahora, los plenos, dentro del servicio que ofrece el 010, serán emitidos en su integridad a través de la página municipal, con lo que los ciudadanos que se conecten podrán seguir el debate, como ya ocurre con las sesiones del Parlamento andaluz.
Eso sí, los plenos ordinarios suelen comenzar a las nueve y media de la mañana y finalizar bien entrada la tarde (se han vivido sesiones de más de diez horas) y en la web municipal no se ofrece el orden del día -como ocurre en la Cámara andaluza- para seguir el debate con más información, que ponemos a su disposición en nuestra web.
El Ayuntamiento enmarca esta medida en su Estrategia Municipal de Transparencia y en concreto en el objetivo de formentar la participación ciudadana, y la iguala a la plataforma e-democracia, que permite realizar propuestas, debatirlas en asambleas virtuales, votarlas e incluso incluirlas en el orden del día de las Juntas de Distrito.
La retransmisión vía streaming de los plenos ya había sido solicitada en varias ocasiones por la oposición pero nunca se había llevado a cabo. Este paso de transparencia, sin embargo, contrasta con la dificultad de los ciudadanos para acceder a las actas plenarias en su totalidad, tras la instauración de las miniactas o audioactas que, con el argumento de reducir costes y ser más eficaz ante los retrasos acumulados, ha convertido las actas en una mera reproducción de puntos, votaciones y acuerdos sin incluir debates ni intervenciones, que son documentalizados en soporte audio para su consulta y archivo.
La instauración de las miniactas dejaba en el aire el acceso a las mismas de los ciudadanos que pueden optar por seguir el debate por la red, por ahora sin orden del día de apoyo. Y esa infoxicación o sobrecarga informativa, también contrasta con la imposibilidad de consultar un acta oficial de lo debatido en la sesión plenaria.
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