El Ministerio de Exteriores está "plenamente movilizado" por el secuestro, cuya autoría aún no ha sido reivindicada. Los otros cinco franceses secuestrados en Níger están en manos de la red terrorista Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).
El secuestro se produjo ayer noche en el restaurante "Le Toulousain" entre las 22.30 y las 23.30 hora local, un establecimiento frecuentado por ciudadanos expatriados y emplazado en un barrio residencial de Niamey, según explicó a Radio Francia Internacional (RFI) un testigo presencial.
"Cuando entraron, se dirigieron los dos franceses y les dijeron: tú y tú, seguidnos. Con la precipitación, uno de los asaltantes perdió su turbante", explicó el testigo, quien precisó que los secuestradores eran dos hombres bien armados, que hablaban en árabe y se cubrían la cara con turbantes.
Los delincuentes, que no dispararon pero obligaron a los clientes a echarse al suelo, escaparon en un vehículo 4x4 con las lunas tintadas y con matrícula de Benín en el que les aguardaban más hombres armados, señaló otro testigo presencial.
Uno de los testigos del restaurante intentó perseguir a los secuestradores con su propio coche durante un kilómetro, pero éstos conducían a gran velocidad y con las luces apagadas, lo que impidió que les pudiera alcanzar, declaró.
Según fuentes policiales citadas por los medios galos, uno de los ciudadanos apresados habría llegado el mismo viernes a Niamey para asistir a una boda.
El secuestro se produce cuatro meses después del rapto el 16 de septiembre de 2010 de cinco franceses, un togolés y un malgache en el norte de Níger, donde trabajaban para los grupos franceses Areva y Satom, dedicados a la extracción de uranio en la zona de Arlit.
Cinco días después, Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) reivindicó el secuestro.
La ministra francesa de Exteriores, Michèle Alliot-Marie, aseguró el pasado 1 de diciembre que los rehenes seguían con vida, después de que esa organización terrorista hubiera exigido a Francia el 19 de noviembre que negociase su liberación directamente con el líder terrorista Osama bin Laden.
Los captores exigían que París retirase sus tropas de Afganistán, donde dispone de un contingente de unos 3.500 soldados, a lo que el jefe del Estado, Nicolas Sarkozy, contestó que Francia no dejaría "que nadie dicte su política".
El mismo grupo terrorista ejecutó el pasado mes de julio al cooperante francés Michel Germenau, secuestrados dos meses antes.
En total, diez ciudadanos franceses se encuentran secuestrados fuera de su país. A los citados, se suman dos periodistas de "France 3" retenidos desde hace un año en Afganistán y un presunto espía galo cautivo desde julio de 2009 en Somalia.
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