Con 4.585.648 pernoctaciones y una ocupación media del 68,5 por ciento, Torremolinos supera ya la ocupación media de 2008, último año sin crisis económica, en el que tuvo 4.457.757 pernoctaciones.

Respecto a 2011, también Málaga aumenta su ocupación en un 4 por ciento, y en Marbella lo hace en un 1 por ciento, pero Benalmádena y Fuengirola tienen importantes caídas, con un – 11 por ciento y – 13 por ciento, respectivamente.

En los porcentajes de ocupación, que indican la posible rentabilidad de los hoteles, también Torremolinos se sitúa a la cabeza, con una ocupación media del 68,5 por ciento, seguido de Benalmádena, con un 61,2 por ciento; Málaga, 56,33 por ciento; Fuengirola, 52,8 por ciento, y Marbella, con un 47 por ciento.

En su conjunto, la Costa del Sol aumenta en 87.001 pernoctaciones, un 0,6 por ciento más, pero no hay que ser demasiado experto para ver que, sin las más de 365.398 pernoctaciones de Torremolinos, habría tenido -278.397 pernoctaciones, con un retroceso del 1,8 por ciento. Dicho de otro modo, Torremolinos ha salvado el año turístico de la Costa del Sol.

Respecto a Torremolinos, ha de señalarse que, a pesar de haber tenido 128.117 pernoctaciones menos de españoles (un –8 por ciento), el crecimiento de extranjeros ha sido espectacular, con 493.575 más de pernoctaciones, un aumento del 19 por ciento.

Los datos del Instituto Nacional de Estadística se resumen en el siguiente cuadro:

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