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Jerez

Jesús Jiménez: "La Gripe A fue un camelo y los vacunados, conejillos de indias"

"Hay personas que me están tanteando de cara a las próximas elecciones municipales"

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  • El poeta y escritor Jesús Jiménez Suárez firmando un libro a uno de sus múltiples seguidores
No conocía a Jesús Jiménez, pero Juan Morilla presidente del Círculo Mercantil y amigo común, me invitó a la presentación del libro de Jesús: Una puerta en el desierto, causándome una grata impresión el autor y su obra motivando esta entrevista.

—¿Dónde nació?
—Mi infancia transcurrió en La Línea hasta los ocho años, porque mis padres con motivo del cierre de La Verja de Gibraltar tuvieron que desplazarnos hasta Valenciaespuesta.
—¿Se adaptó al cambio y estudió?
—En un principio no fue traumático sino un revulsivo. Estudié en el Luis Vives de Valencia hice el bachiller y fue el principio de mis conocimientos del mundo literario, porque como bien sabes en el bachiller empieza uno a encontrar este tipo de cosas.Respuesta.
—Finalizado el bachiller, ¿qué hace?
—Me fui voluntario al Servicio Militar y fui especialista de Marina. Hice varios estudios como náutica, navegación, astronomía, cinemática. Fue una experiencia agradable porque en un principio pensaba en la carrera militar, pero de forma que la fui conociendo comprendí que eso no era lo mío.Respuesta.
—¿Se licencia?
—Me licencio y me fui a Barcelona donde durante tres años estudié Naturopatia y me especialicé en Iridologia. Conocí a muchísimas personas que me metieron en el campo tan complejo entonces de esa medicina distinta que es la Medicina Natural, desde el punto de vista de lo convencional que es un poco la alternativa.
—¿Su vida laboral la encaminó desde la Medicina Natural?
—Monté consulta en Barcelona y a raíz de eso mi vida ha tenido muchos cambios lógicos y naturales. Después un paciente de La Línea fue a verme allí y como se puso mejor lo divulgó en La Línea y esa fue la causa de que instalase la consulta en La Línea.
—¿Por qué la medicinal tradicional, no acepta los medios naturales para curar?
—Porque hay tantos intereses creados en torno a la medicina convencional, que la medicina natural se convierte en una piedra en el zapato en la industria farmacológica y en la medicina digamos general.
—Para mí fue un camelo lo de la Gripe A, ¿qué opina?
—Siempre dije que la Gripe A fue un auténtico camelo. Porque desde que comenzó ese maremágnum de datos e informaciones, fui muy atrevido y me salté todas las barreras posibles, diciendo que no era correcto que la gente se vacunase, porque era una forma de jugar con las personas y de someterlas como conejillos de indias. .
—¿El tiempo le ha dado la razón?
—El tiempo me ha dado la razón, porque ha sido una auténtica falacia creer en una cosa que no era en absoluto ni lo que estaban diciendo, ni tampoco el medio que disponían para solucionarlo era el más idóneo.
—¿Por dónde camina políticamente?
—Camino siempre por el lado más cómodo que me dicta el corazón y el corazón está ubicado en un sitio.
—¿Ha sido tocado por la política?
—En el transcurso de mi vida siempre hubo personas que tenían intención de que me incorporase a algún partido pero aún no lo he decidido, pero hay personas que me están tanteando de cara a las próximas elecciones.
—A su regreso a La Línea, ¿se integró totalmente?
—Aquello generó una vinculación directa y absoluta con el pueblo. Me integré totalmente aunque no fue fácil porque venía de una capital, pero La Línea ha sido siempre para mí una ciudad de gran armonía, a la que quiero evidentemente, donde me casé y gozo de una reputación digna y me siento feliz.
—¿Qué clase de pacientes acuden a su consulta?
—Trato a todo tipo de pacientes porque el que viene a la consulta de Medina Natural es por convencimiento al conocer tu trayectoria, como te mueves y qué haces. Vienen por referencias con ese bis a bis que existe. La gente acude para encontrar una solución como si fuese una alternativa a la medicinal convencional.
—-¿Qué es la Iridologia?
—Es una ciencia que trata de encontrar en el iris de cada ojo aspectos concretos como manchas, criptas, lagunas, pigmentos… que indican en la topografía de los ojos cualquier tipo de enfermedad que pueda aparecer en el organismo.
—¿Qué momento atraviesa la Iridologia?
—Es un proceso que desde hace muchos años se viene utilizando, pero ha quedado un poco en desuso porque han venido otros procedimientos más modernos, como pueden ser las ecografías, las resonancias magnéticas. Pero no por ello deja de ser un procedimiento científico absolutamente fidedigno como método de diagnostico.
—Los titulados en medicina tradicional, ¿qué piensan sobre usted y su profesión?
—No me interesa lo más mínimo lo que piensen y cómo me vean, porque nunca ha sido para mí un inconveniente ni tan siquiera en la relación humana. Tengo una relación cordial con muchos profesionales de la medicina convencional y hay un entendimiento natural. Cuando hablamos de salud debemos ser coherentes con nuestros pensamientos, porque el fin de cada uno de nosotros es el mismo, por lo tanto debemos tener una relación lo más cordial posible.
—¿Qué es la poesía para usted?
—Cuando empiezas a leer a los clásicos en el bachiller te inmiscuye en ese mundo tan maravilloso y profundo de la literatura y comienzas a identificarte. La poesía fue lo que más me atrajo siendo una de las facetas más importante de mi vida. Porque al ver la vida y al ser desde una perspectiva muy particular que llevas en el interior, tienes la necesidad de expresarlo poéticamente en cada instante. Por lo tanto cuando escribo poesía desnudo mi alma y mi corazón.
—¿Libros publicados?
—En el año 2000 se publicó mi primer poemario titulado: El color de mis sentidos. Después escribí la novela aún inédita: El demonio vencido, después escribí Una puerta en el desierto, recientemente presentado en el Círculo. Y ahora he acabado el libro El Mensaje del fuego.

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