Escuchar activamente, compartir experiencias y buenas prácticas, salir de nuestra burbuja particular de la jornada laboral, y descubrir testimonios rebosantes de vida, es un soplo de aire fresco para reciclarse y aprender. Ayer, en la Facultad de Trabajo Social, más de un centenar de personas, pudimos dejarnos contagiar por la trabajadora social, Mª Josefa Vázquez y dos excelentes profesiones de la Educación Social, Raúl Tapias y Rocío Martínez. Raúl, nos ha acercado el día a día, de la Casa de Acogida de Cáritas Diocesana para Personas sin Hogar…esa pequeña “Torre de Babel” donde confluyen diferentes ámbitos socioculturales, con sus necesidades y problemáticas. Procurando hacer de ese espacio compartido, un hogar referente de inclusión. Nos ha inyectado una ingente dosis de confianza...“poniendo recursos, se pueden lograr, los propósitos de las personas que están sufriendo las consecuencias del sistema”. Él habla de la necesidad, de ser agentes de transformación social, para ayudar a otras/os a “Coger su vida en peso y tirar para adelante” ¿Cómo? Pues desde el acompañamiento integral, la planificación y adquisición de compromisos vitales y conductuales, desde el fomento de la autonomía, el aprendizaje de destrezas y habilidades básicas, desde la búsqueda activa de empleo o formación encaminada a la inserción, desde un seguimiento cercano y humano…Habla de ir adquiriendo ingredientes fundamentales como la convicción en lo que se hace, y la madurez, que nos va aportando la interacción con los/as demás y sus múltiples realidades. Rocío, nos presentaba con frescura y cercanía, su labor Unión Romaní. La importancia de desechar cualquier síntoma etnocentrista que nos haga defendernos de visiones superficiales estereotipadas de determinados grupos, colectivos o minorías étnicas. Recalcaba la actuación permanente de ser nexo de comunicación entre comunidades, ayudándonos a descubrir las riquezas de las culturas, especialmente de la comunidad gitana, mayoritaria en España y en nuestra Comunidad Autónoma, Andalucía. Respetar la Cultura Gitana como un valor. Estas finalidades, se encuentran en la base de todos los Programas del Equipo de trabajo socioeducativo de su entidad (Tránsito, Alfabetización…). Instrumentos centrados, en la puesta en marcha de recursos de aprendizaje, de desarrollo sociocultural, cohesión grupal, de animación a la lectura a menores y familias, de incorporación de estilos y hábitos saludables, de conjugación de culturas…Para ella, la vocación y la creatividad, son las mejoras disposiciones personales y profesionales para valorar significativamente el sentido del quehacer educativo social. La Mesa Redonda de ayer, fue toda una experiencia para moldear y aliviar el pensamiento. Un impulso para reivindicar que se preserven los sistemas públicos de protección y la fuerza y apoyo al tejido participativo del Tercer Sector. Y para hacer nuestra ese deseo común, esa pregunta- verso del poeta Eduardo Galeano:“¿Entonces para qué sirve la Utopía? Para eso. Para Caminar”… Gracias por lo recibido y transmitido…Palabras que tienes rostros, que saben del dolor pero mucho más de Esperanzas.
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