Teología de Málaga

Teología de Málaga. Ciudad de Schrödinger

Doce años después, el Tercer Hospital vuelve a pararse. Claro que la pregunta quizá sea si alguna vez estuvo en marcha

Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai
Cargando el reproductor....

Doce años después, el Tercer Hospital vuelve a pararse. Claro que la pregunta quizá sea si alguna vez estuvo en marcha. O, por el contrario, solo fue el enésimo engaño. En todo caso, ahora el delegado de Salud advierte que “hay que pararse y reflexionar”. Sí, es el mismo delegado que en marzo, seis meses atrás, hizo un video provocador y bastante zafio rajando de sus antecesores por no hacer nada y mostrando lo avanzado que ellos llevaban todo, exhibiendo unas carpetas supuestamente probatorias. Y pocos días después, sí, en una exhibición sin precedentes de eficacia, en efecto hubo un acto en el que la Diputación cedía los terrenos para el Tercer Hospital: allí estaba su presidente, el consejero, el alcalde y Bendodo, con la fanfarria al uso, fotos de manos entrelazadas y caras de somos-unos-fenómenos, entre titulares triunfales. Pero seis meses después, bluf… vuelta a empezar.

¿Que usted se creyó aquello? ¿Qué usted no pensó que a un mes de las elecciones de abril, aquello era un acto electoralista sin más? ¿Qué usted no se dijo que allí estaba Salado en calidad de presidente de la Diputación, Aguirre en calida de consejero, De la Torre en calidad el alcalde, pero Bendodo en calidad de presidente del PP…? Pues a usted le toca, en su pecado de la ingenuidad, llevar ahora la penitencia, porque meses después se ha descartado aquel proyecto de 400 millones y ahora se estudian terrenos hacia el Este, y la firma de marzo se deshace como papel mojado con sus 800 camas ya evaporadas otra vez. No es que jueguen a los dados; es que juegan con nosotros.

La buena noticia: que en pocos días, antes de volver a las urnas, nos dirán que ya sí, con mucho tachintachán. La mala noticia: que volverá a suceder lo mismo después de votar y será que no. Y así vamos, de campaña en campaña, desde la década anterior mientras ya acaba ésta. El tercer hospital va como aquella vieja cumbia, dos pasitos pa’lante y un paisto pa’tras, o como La Yenka, “izquierda, izquierda, derecha, derecha, adelante detrás, un dos tres”…  Se avanza retrocediendo; se retrocede entre promesas de estar avanzando, se hace deshaciendo, se deshace sin hacer, y así estamos sin saber dónde estamos como sometidos el principio de incertidumbre de Heisenberg. El Tercer Hospital, al modo de tantas otras cosas en Málaga, es como aquel ‘gato de Schrödinger’ vivo y muerto al mismo tiempo. Hay y no hay Tercer Hospital. Claro que, más allá de la paradoja de Schrödinger tan malagueña, Tercer Hospital sólo hay en la propaganda, pero no, no hay Tercer Hospital en la realidad.

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN