Ante la decisión de la juez de Instrucción número 5 de Sevilla de archivar el caso de Piotr Piskozub, el joven polaco que falleció el día 2 de octubre de 2013 en el centro de acogida municipal después de haber sido dado de alta en el Hospital Virgen del Rocío, la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDH-A) sostiene que la ineficiencia de los protocolos de atención de la Consejería de Salud ante casos como este pueden hacer a dicho departamento "responsable directa de la muerte", avisando de la posibilidad de que se repitan casos así.
Como hemos informado, la juez ha resuelto archivar la causa porque "no aparece debidamente justificada la perpetración de delito o falta alguno" y "no existen indicios suficientes" contra los cuatro imputados en la causa. "Para el caso concreto de la culpa médica, se ha establecido que no la constituye un mero error científico o de diagnóstico, salvo cuando se trate de un error cuantitativo o cualitativo de extrema gravedad", expone la juez en este auto recogido por Europa Press.
Ante esta tesis, APDH-A señala que las "conclusiones" de la juez "hacen decaer la acción penal, ya que debe existir una relación causal directa entre el error médico, error de diagnóstico en este caso, y el fallecimiento", si bien tal extremo "no significa que en esta muerte no haya responsables". "Después de dos años de instrucción, las lagunas de los protocolos en la atención a las personas en exclusión social en las urgencias son tan grandes, que es posible que puedan suceder casos con consecuencias tan dramáticas como la de Piotr", avisa APDH-A.
Y es que "Los protocolos que en la práctica se han utilizado estaban dirigidos a expulsar cuanto antes del sistema a este colectivo y atender de manera prioritaria su derivación fuera del sistema sanitario sin aplicación de pautas médicas especiales por el hecho de ser precisamente un colectivo más vulnerable a la hora del padecimiento de determinadas enfermedades y sus recaídas".
"Estos protocolos, que fueron actualizados por la Consejería de salud a raíz de la muerte de Piotr, no contienen cambios reales, existiendo enormes lagunas, muy parecidas a las del momento del fallecimiento de Piotr", opina la organización. Buena prueba de ello, según APDH-A, es que "continúan produciéndose alta clínicas de personas en riesgo social sin la adecuada derivación social hacia las unidades de trabajo social hospitalarias, entre otras cosas porque no trabajan las 24 horas que se encuentras activas las urgencias".
"Es posible que no exista responsabilidad penal de un profesional concreto, pero es evidente que la Consejería de Salud y Bienestar Social ha mantenido y mantiene un sistema de atención que, además de ineficaz, ha podido hacerla responsable directa de la muerte de Piotr Piscozub. Así mismo, aludimos a la responsabilidad del Ayuntamiento. No podemos admitir que haya ningún ciudadano viviendo en la calle y menos deteriorándose progresivamente como le ocurrió a Piotr. Tampoco podemos admitir que ningún ciudadano de Sevilla pueda llegar a ser marcado con el sello de "problemática social" cuando ha sido excluido de la sociedad. ¿Quién va a responder por ello?
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