Con responsabilidad adoptaron los miembros de la junta de gobierno de la Hermandad de la Sagrada Resurrección la decisión de no realizar la salida procesional a la Parroquia Mayor de La O prevista para este Domingo de Resurreción.
Pocos fieles se dieron cita este domingo a las ocho y media de la mañana en la puerta de la Iglesia de San Francisco, quizás convencidos de que el tiempo no iba a dar una nueva tregua, como si que ha venido sucediendo a lo largo de esta Semana Santa. La Hermandad decidió posponer la decisión sobre su salida media hora, pero la balanza finalmente se decantó por el lado de la prudencia y la responsabilidad. Los costaleros, penitentes y miembros de la Agrupación Musical Sagrada Resurrección, que esperaban este día ansiosos, mostraron ante Jesús Resucitado su tristeza por no poder acompañarlo por las calles de Sanlúcar. En el interior del templo de San Francisco, los miembros de la Hermandad permanecieron orando y realizando la Estación de Penitencia durante algo más de una hora, antes de que se abrieran las puertas al público para que pudiera contemplar una imagen que año a año la Hermandad va mejorando y que, en esta ocasión, iba a estrenar en la calle el dorado de la parte trasera de la canastilla y las coronas de los candelabros de los guardabrisas.
Se acababa así una Semana Santa que ha estado marcada por la incertidumbre y que, al final, ha dejado en su templo a la única Hermandad que en desde 2007 no había sufrido las inclemencias meteorológicas.
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