Castells declaró ayer durante una hora y cuarto como testigo ante la titular del juzgado de instrucción número 10 de Barcelona y posteriormente, en una breve comparecencia ante los medios, ha asegurado que le ha dejado “meridianamente claro” a la juez que su actuación en este proyecto fue “irreprochable” y “cristalina”, ya que “siempre, siempre, siempre” pensó en el interés público.
La juez citó como testigo a Castells para que aclarara la intervención de su consellería en la operación de recalificaciones que iba a permitir la construcción de un hotel de lujo junto al Palau de la Música, a raíz de la querella por tráfico de influencias y apropiación indebida que presentó la Fiscalía contra Fèlix Millet y Jordi Montull y que ha acabado llevándolos a la cárcel.
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