La Delegación Territorial de Empleo de la Junta de Andalucía en Cádiz anunció esta semana la convocatoria en la provincia de 16 proyectos de escuelas taller y talleres de empleo a partir del primer trimestre de 2018. Su estimación es que unos 250 gaditanos en paro se beneficiarán de estas iniciativas que no se convocan desde 2011.
En el mismo mes en el que se hace el anuncio se ha conocido que el número de parados registrados en la provincia en octubre ascendió a 158.346 personas, una subida del 3,50% -la más alta de toda la Comunidad Andaluza- con 5.358 desempleados más respecto a septiembre.
Según la resolución provisional está previsto que a partir del primer trimestre de 2018, se desarrollen 16 proyectos de este tipo, de los cuales 7 son escuelas taller, y 9, talleres de empleo. Dicha formación contará con una inversión del Gobierno andaluz de 4,2 millones de euros.
Se trata de programas mixtos de empleo y formación de un año de duración, destinados a jóvenes menores de 25 años en el caso de las escuelas taller, y mayores de 25 años para los talleres de empleo. En los dos casos, se considera colectivo preferente a los jóvenes desempleados con déficit formativo. Y, en el caso específico de los talleres de empleo, también tienen prioridad las personas desempleadas mayores de 45 años.
La oferta para 2018 dista mucho de las aprobadas con anterioridad a la crisis y al caso del fraude en la formación. Por ejemplo en 2009, hubo 43 talleres de empleo, 19 escuelas taller y cinco casas de oficio, según ha informado Podemos, crítico con el anuncio de la Consejería. "Nos parece una broma de mal gusto que la Junta anuncie a bombo y platillo que retoma la formación después de años de paralización y cuando el desempleo castiga a casi 15.000 menores de 25 años y 73.000 mayores de 45 años de la provincia de Cádiz sólo este pasado mes de octubre", dijo el coordinador provincial de Podemos, José Ignacio García.
De los 44 municipios de la provincia sólo diez: los cinco de la Bahía de Cádiz (Cádiz capital, San Fernando, El Puerto de Santa María, Chiclana y Puerto Real); Jerez y San José del Valle en la zona centro de la provincia; Rota, de la Costa Noroeste; y Algeciras y San Roque, en el Campo de Gibraltar.
En diciembre de 2016, la Consejería aprobó una orden para desarrollar estas escuelas y talleres que obligaba a los ayuntamientos a adelantar el cuarenta por ciento del presupuesto, algo que se ha suprimido ahora con una nueva orden con fecha de septiembre de 2017. Para el coordinador provincial de IU Cádiz, Fernando Macías, la administración ha cambiado las reglas de juego una vez empezado el partido y ha dejado a muchos municipios sin opción de solicitarlas porque no podían hacer frente a unos gastos obligatorios en un principio. Macías es también alcalde de Medina Sidonia, municipio que ha quedado excluido y asegura que el suyo no es un caso único y que se trata de municipios muy castigados por el desempleo.
La delegada territorial de Empleo, Gema Pérez (PSOE), ha destacado la decisión de la Consejería de anticipar el 75% sobre el total de la subvención concedida a las entidades locales beneficiarias, para facilitar el desarrollo de los proyectos. Gema Pérez ha enfatizado que, en su opinión, “es una decisión valiente del consejero para facilitar el desarrollo de este programa”.
Para las centrales sindicales CCOO y UGT, el anuncio es una grata noticia, pero el proyecto es insuficiente. Grata porque ambas entienden que se trata de un instrumento necesario imprescindible en un territorio duramente castigado por el desempleo. Insuficiente porque es preciso un mayor número de escuelas talleres y talleres de empleo, ya que argumenta que la formación es crucial para la reinserción laboral tanto de mayores como de adultos. Tanto la secretaría de Administración y Formación de UGT, Paula Fernández Danino, como la de Acción Sindical y Empleo de CCOO, Inmaculada Ortega, no dudan en calificar de insuficiente la convocatoria y reclaman más inversión en políticas de empleo. Coinciden en que la Junta de Andalucía minimizó estas iniciativas cuando más necesidad de formación había y hay en la provincia.
Ambas sindicalistas añaden que estos talleres y escuelas talleres deben de estar enfocados a dar respuesta a las necesidades del mercado laboral en el territorio gaditano y señalan los sectores de Industria, Tecnología y Servicios como los objetivos a los que se deben dirigir.
Por el PP se ha criticado a la Diputación, que no gestionará ninguna de estas dos herramientas. El portavoz popular en el ente, José Loaiza ha acusado a la presidente de la Diputación, la socialista Irene García, de otorgar a Diputación “un papel irrelevante en la recuperación económica” y ha lamentado que “los socialistas hayan renunciado a arrimar el hombro para la creación de puestos de trabajo: la institución provincial se queda sin escuelas taller y talleres de empleo, frente a los 70 millones que invirtió Diputación para el empleo con el PP en el Gobierno en el anterior mandato”.
Formación y trabajo productivo
Las escuelas taller y los talleres de empleo son proyectos de carácter temporal en los que se alternan la formación con el trabajo productivo. Están orientados a la consecución de certificados de profesionalidad.
En el caso de las escuelas taller, los proyectos constan de dos etapas, una primera etapa formativa de iniciación, en la que el alumno trabajador recibirá formación profesional y percibirá una beca y, una segunda donde se complementa su formación en alternancia con el trabajo y las práctica profesional, siendo contratados por las entidades promotoras de los proyectos. En el caso de talleres de empleo, recibirán la formación profesional adecuada a la ocupación a desempeñar en alternancia con el empleo y serán contratados por las entidades promotoras desde el primer día.
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