Previamente, los trabajos de extinción habían sido realizados por efectivos del Infoca, sobre los que recaen las competencias de incendios forestales. La intervención de Bomberos, que se desplazaron en un vehículo rural pesado y uno urbano ligero, se concretó a evitar la propagación de las llamas al cortijo El Águila, cercano a la zona, y propiedad del empresario taurino Curro Mateo, ya que las llamas amenazaban a las manadas de reses bravas del mismo, así como a sus edificaciones.
La lengua de fuego que se formó a última hora de la tarde en la zona de Portichuelos pudo contemplarse desde bastante distancia. Además, el incendio fue especialmente peligroso, por la cercanía de la carretera y de concentraciones residenciales.
Pese a la virulencia de las llamas, avivadas por el viento de levante, únicamente afectó a una zona de monte bajo, sin que se extinguieran las llamas al arbolado. Los efectivos del Infoca tuvieron que emplear más de 6.000 litros de agua en su extinción, aunque el fuego aún no había sido sofocado al cierre de esta edición.
Se trata del segundo incendio forestal de importancia que se produce en la comarca en el verano, después del que se generó el pasado 11 de agosto en el Parque Natural de Los Alcornocales, en Los Barrios, donde se calcinaron cuatro hectáreas de bosque.
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