La justicia decidirá si un doctorando puede terminar su tesis doctoral en la Universidad de Jaén (UJA). José Manuel Gámez Jiménez es licenciado en Derecho por la UJA en la promoción 2001-2003, pero su carrera profesional se ha visto truncada y la ilusión con la que comenzó su camino a Doctor ha acabado en lamento. Su tesis doctoral lleva paralizada desde 2010 y su caso ha llegado al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
Este jienense obtuvo el certificado de suficiencia investigadora en 2003. Ese mismo año la Junta de Andalucía le concedió una Beca de Investigación en el marco del Programa de Doctores en Universidades Andaluzas. Adscrito al área de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la UJA, comenzó el doctorando con tesis doctoral dirigida por el profesor Cristóbal Molina Navarrete.
Desde octubre de 2007 a octubre de 2012 fue profesor ayudante en ese mismo área, pero en el año 2010 el profesor Molina Navarrete le comunicó que no continuaría con la dirección de su tesis doctoral por “desavenencias de criterio académico”.
Este jienense lleva desde ese momento sin que la Universidad le asigne a un profesor doctor de cualquier rama del Derecho que dirija el proyecto de tesis y poder convocar, finalmente, un tribunal que la evalúe para conseguir el título de Doctor. Así durante tres años. Su caso ha llegado a los tribunales.
En octubre de 2012 dejó de trabajar en la UJA como profesor ayudante, pero ya llevaba dos años reclamando poder terminar su tesis. “A pesar de mis múltiples peticiones, no se ha nombrado sustituto para superar este trámite, al que tengo acreditado derecho”, valora, incoando entonces un proceso Contencioso-Administrativo contra la institución académica en el Juzgado número 1 de Jaén.
La sentencia recoge como antecedentes de los hechos que la UJA se niega a nombrarle un director tras los problemas personales irreconciliables que tuvo con su primer director, que decidió unilateralmente cesar en esa responsabilidad y no firmarle el proyecto, dejándolo sin posibilidad de presentarlo.
“En la actualidad me encuentro en una situación de inactividad obligada, máxime ante la tardanza de los procedimientos judiciales. Mi tesis está muy avanzada y pendiente de revisión”, recuerda el afectado.
Se dictó sentencia el 24 de febrero de 2012 a su favor, condenando a la UJA a nombrar un director de sus tesis doctoral, pendiente de corrección. “La Universidad se ha negado a cumplir la sentencia, cercenando inexplicable y frontalmente mi futuro profesional”, dice.
La UJA ha recurrido la sentencia y en la actualidad el caso de este jienense ha llegado al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
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