Este lunes ha sido un día de emociones encontradas. De despedir un verano que seguro que a los pequeños se les ha hecho demasiado corto y de dar el primer paso para volver a a esa rutina también algo añorada en los hogares. Momentos de reencuentros en las aulas y también de curiosidad e incluso alguna lágrima ante el inicio de una nueva etapa educativa, e incluso la primera para los niños de 3 años.
Huelva ha vivido una ‘vuelta al cole’ que en el caso de la capital tiene este año una gran novedad: la inauguración de un nuevo colegio, el tan demandado centro público para el centro capitalino, que al fin ha abierto sus puertas en el Ensanche Sur.
Con plazas sin cubrir, el nuevo espacio ha echado andar con poco menos de 60 años pero dispuesto a afianzarse en la oferta educativa de la capital.
De hecho, la Asociación de Vecinos Pescadería se felicitaba por esta especial ‘vuelta al cole’ de 2023, pues “después de años de lucha para conseguir un colegio para el barrio, abre sus puertas a los niños y niñas cuyos padres y madres creen en la enseñanza pública”.
Al respecto, aseguran que se trata de “un colegio en una situación estratégica y en una zona de Huelva en expansión” y apuntan que, a partir de ahora, se fijarán como objetivo otra demanda educativa: “un instituto de Secundaria que haría que los niños y niños que comienzan aquí su itinerario educativo pudieran continuar en el barrio”.
Pero más allá de la capital, este lunes han pisado las aulas un total de 45.873 alumnos de segundo ciclo de Infantil, Primaria y Educación Especial, que han comenzado las clases en 172 centros docentes en toda la provincia.
Sobre las ratios de alumnado por aula, la Junta aseguraba que la planificación de la oferta educativa andaluza permitirá que vuelva a bajar en Huelva en Infantil y Primaria en los centros públicos. Así, indican que “si el curso pasado era 19,1 en Infantil, este año se sitúa en 18,5; en Primaria baja hasta el 19,4 y en Secundaria hasta el 25,7. Hay descensos de las ratios medias en todas y cada una de las ocho provincias”.
Sin embargo, en el sindicato CSIF no están de acuerdo. Así, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios en Huelva ha criticado este lunes “carencias” como “la elevada ratio y la reducción de unidades, pese a la notoria bajada de natalidad”, en el inicio del nuevo curso escolar.
La responsable de Educación de CSIF Huelva, Prado Rodríguez, ha destacado el “compromiso y la ilusión” con la que los docentes afrontan este periodo, aunque ha subrayado “la necesidad de abordar las carencias y déficits que persisten en el sistema educativo” en la provincia onubense.
Rodríguez ha señalado la “unos de los principales problemas” la “elevada” ratio, lamentando que “a pesar de las reiteradas denuncias, no se han tomado medidas significativas para reducir estas cifras, lo que pone en riesgo la calidad de la enseñanza que se puede ofrecer a los alumnos”. En este sentido, la responsable de Educación de CSIF Huelva ha instado a las autoridades educativas a abordar esta cuestión “de manera urgente y efectiva”.
Además, ha expresado su “preocupación” por la reducción de unidades “en lugar de aprovechar la notable disminución de la natalidad”, lo que “permitiría una reducción del número de alumnos por aula”. Esta medida, según la representante sindical, “contribuiría a mejorar la calidad educativa de la escuela pública”.
La Junta también señalaba ese descenso del número de alumnos, pues en total, este mes de septiembre comenzarán las clases en la provincia onubense un total de 103.399 estudiantes: “Este curso está marcado por un nuevo descenso de alumnado en las etapas obligatorias debido a la bajada de natalidad, reflejada sobre todo en las enseñanzas de segundo ciclo de Infantil y Primaria, con alrededor de 1.120 alumnos menos. Además, por primera vez en Secundaria también bajan los estudiantes matriculados en 110. Es decir, un descenso en torno a los 1.230 alumnos”.
Las clases en Secundaria arrancarán este viernes desde Aracena ya han lanzado la voz de alarma. A través de un comunicado, la comunidad educativa del IES San Blas ha afirmado sentirse “abandonada” por la Administración educativa, pues el curso comenzará “con grupos con hasta 37 alumnos hacinados en aulas diseñadas para 25, con instalaciones muy precarias, con una falta de personal de servicios que continúa y con una sola orientadora para un centro de mil alumnos”.
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