El refugiado sirio Osama Abdul Moshen, conocido por sufrir la agresión de una periodista húngara e instalado desde septiembre en la localidad madrileña de Getafe, ha pedido ayuda por carta al presidente del Gobierno Mariano Rajoy para lograr reunir a su familia.
En un misiva dirigida personalmente a Rajoy a la que ha tenido acceso Efe, Osama explica que dificultades burocráticas le impiden poder traer a España a su esposa, su hija y su hijo mayor, que según relata se encuentran en Turquía en condiciones "de pobreza extrema".
Osama achaca esta situación al hecho de que no cuenta con asilo ni protección internacional tres meses después de su llegada a España por "diferentes motivos" que, según recalca, conoce el Ministerio de Asuntos Exteriores.
Aunque agradece el permiso de residencia que se le concedió junto a dos de sus hijos, el refugiado afirma sentirse maltratado por la embajada de España en la capital turca, Ankara, que según refiere no contesta a sus llamadas y peticiones.
Osama Abdul Moshen recuerda que algunos de los requisitos que se le piden para formalizar su situación son imposibles de cubrir porque no puede acudir a la embajada de Siria en su condición de refugiado perseguido "por el régimen dictador".
"Mi hijo Zeid llora todas las noches porque quiere ver a su madre que lleva dos años sin verla, le suplico y le ruego como ser humano que ordene el visado de mi familia para poder pasar las navidades juntos. Piense que hemos escapado de una guerra y llevo cuatro años dando tumbos, y ahora tengo la oportunidad de empezar una nueva vida en su país", concluye la misiva.
Osama Abdul Moshen, entrenador de fútbol profesional antes del conflicto sirio, llegó el 17 de septiembre a España para comenzar una nueva vida trabajando en la Escuela nacional de entrenadores de fútbol (Cenafe), ubicada en la localidad madrileña de Getafe.
Viajó a Madrid desde Múnich acompañado de su hijo Zaid, de 7 años, y de otro hijo de 18 años, que se unió a ellos en Alemania, adonde había llegado huyendo solo, también como refugiado, desde Turquía y pasando antes por Italia.
Los tres residen en un piso de Getafe cuyo alquiler abona la escuela a cargo de su fondo para la solidaridad.
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