El portavoz y alcaldable del PP, Beltrán Pérez, ha exigido a Espadas que actúe de inmediato en el arbolado de Las Golondrinas y barrios cercanos “antes de que ocurran más accidentes y haya que lamentar alguna desgracia”. Según Pérez, “no se ha actuado cuando se tendría que haber actuado y hoy para muchos árboles ya es tarde porque suponen un claro riesgo para los vecinos de la ciudad”. Al alcaldable del PP le traiciona el inconsciente al reconocer que no se actuó con los árboles en su momento, frase que debe aplicarse a los mandatos anteriores al de Espadas, empezando por el de Zoido, de cuyo gobierno formó parte Pérez, y remontándonos hasta el de Uruñuela.
Recuérdese que apenas iniciado el mandato de Espadas, en el verano de 2015, la caída de una gran rama cerca del hospital Virgen Macarena causó serias heridas a una persona, motivo por el cual el Ayuntamiento realizó una exhaustiva inspección de los 178.000 árboles existentes. Los técnicos concluyeron que había 16.545 en estado defectuoso que requerían al menos podas de ramas y copas, y 2.477 en estado tal (nivel 4 de riesgo) que podrían desplomarse y por lo tanto había que cortarlos sin más remedio, como se ha venido haciendo y se está culminando ahora. Ese informe técnico es la prueba de cargo contra todas las corporaciones anteriores, que han dejado a Espadas un patrimonio verde sumido en el abandono.
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