Cuando se comenzó la liga ganando con autoridad al CD Loja (3-0) nadie pensaba que al final de la primera vuelta ese flojo rival sólo iba a contabilizar un punto menos que el Cádiz CF. Pero no por méritos propios, sino porque los amarillos han completado una primera mitad de la temporada liguera de auténtica pena.
Con cinco triunfos, cuatro empates y diez derrotas, el Cádiz CF ocupa la 17ª posición, sólo por delante del propio Loja, al que se visitará este fin de semana, el Betis B y el UCAM Murcia. Sólo los murcianos, que están en la categoría casi de rebote, han perdido un partido más que los cadistas, algo que deja bien claro el bajísimo nivel de la plantilla gaditana.
Ni los refuerzos de invierno pudieron evitar una nueva derrota, esta vez ante el filial del Almería, que se mantiene tercero en la clasificación. Cierto es que no se puede culpar a los nuevos de la situación, pero a nadie se le escapa que no parecen quienes más garantías ofrecen para sacar al equipo de donde está.
El mercado sigue abierto, pero la caída en picado del Cádiz CF también y parece no tener fin. El Cádiz CF ha sumado cuatro puntos de los últimos treinta en juego y en los últimos diez partidos sólo ha marcado tres goles obra de Moke y Fall (al Arroyo en el doloroso 2-5) y Albentosa, tres jugadores defensivos.
Esta semana se visitará Loja, el domingo a las 12.00 horas, en un partido nada fácil al tratarse de un terreno de césped artificial. De no ganar, el Cádiz caería una posición más en la tabla y el objetivo no sería otro que intentar salvarse... si es que no lo es ya.
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