Fue un pregón especial, marcado por el acento italiano del pregonero. En sus inicios recordó que un cura da homilías, no pregones, pero sin embargo, hizo un gran esfuerzo por piropear a la Virgen de Gracia y Esperanza con prosa y verso. El pregón tuvo lugar tras la función en honor de la dolorosa del Huerto, que presidió el rector del seminario diocesano de San Bartolomé, José M. Daza Tello.
La celebración religiosa comenzó a las 12.45 horas y una hora y cuarto después comenzaba el pregón de Lanzafame, que fue presentado por el hermano mayor de la cofradía.
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