Según informó a Efe el propio abogado, José Antonio Prieto, su renuncia se ha debido a las dificultades de llevar el caso, pues reside habitualmente en Valencia.
Lars S. M, de 35 años y agente en excedencia de la Unidad contra la Droga y el Crimen Organizado (Udyco), ingresó en prisión por orden del juzgado de instrucción 19 de Sevilla, tras ser detenido por Asuntos Internos de la Policía como supuesto autor del robo de unos 150 kilos de heroína y cocaína en los depósitos de la Jefatura de Policía en Sevilla.
Prieto asistió también en un primer momento a la esposa del policía, que fue detenida y quedó el libertad el pasado día 16 tras depositar una fianza de 30.000 euros por un delito de blanqueo de capitales procedentes del narcotráfico.
Sin embargo, la esposa del agente, M. T. M. S, que es abogada de profesión, lleva a cabo desde la semana pasada consultas para contratar a otro despacho de letrados de Sevilla que lleve su defensa, han añadido las fuentes.
Junto con el ex agente, se encuentra en prisión incondicional sin fianza desde el día 15 la pareja formada por M. A. N. y V. S. G, que presuntamente pusieron en el mercado la droga sustraída de los depósitos de la Jefatura Superior de Policía.
El ex policía arrestado estuvo destinado en la Udyco de Sevilla y abandonó el cuerpo para dedicarse a la compraventa de barcos de recreo.
En junio de 2008 se descubrió que distintos alijos de cocaína y heroína, que según las últimas estimaciones de la juez instructora ascienden a 150 kilos de droga, habían sido robados del depósito policial en la Jefatura de Sevilla y habían sido sustituidos por harina, talco y yeso.
El cambio de las sustancias ha obligado a dejar en libertad en los últimos meses al menos a siete presuntos narcotraficantes que fueron detenidos con varios kilos de droga cada uno y que se enfrentaban a penas de hasta diez años de cárcel.
El robo se descubrió por casualidad, cuando un juzgado ordenó realizar el contraanálisis de un alijo, a petición de un abogado defensor, y la Policía se percató de que la droga había sido sustituida.
Aunque el caso sigue bajo secreto sumarial, la juez ha levantado ya la incomunicación que pesaba sobre los acusados y sus letrados, añadieron las fuentes.
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