Uno de los objetivos más ambiciosos en la vida es convertirte en tu propio jefe. La libertad que produce saber que todo lo que haces repercute en tu economía tiene un gran atractivo. Por ello, no es nada raro que cada vez haya más gente que se plantee emprender y montar su propio negocio, bien como autónomo o creando una pequeña empresa, que puede crecer poco a poco si las cosas van como se esperan. Sin embargo, no todo es tan positivo como parece desde fuera, y se nota en el número de autónomos y pymes que no llegan al año de actividad. Veamos algunos desafíos que tienes que conocer si quieres emprender.
Conseguir financiación
A no ser que tengas un capital importante del que puedas prescindir, lo primero que te hará falta para empezar tu negocio es apoyo económico. El problema es que hoy los bancos prestan poco dinero, por no decir que han cerrado el grifo por completo.
¿Dónde se puede conseguir algo con lo que empezar? Hay fórmulas alternativas a los bancos. Por ejemplo, se puede buscar un socio capitalista que crea en nosotros, aunque habrá que compartir los beneficios y rendir cuentas de todo lo que se hace. También puedes recurrir a los minicreditos online, que tienen ventajas como la inmediatez con la que consigues el dinero, que puedes decidir cómo devolverlo y que no necesitas demasiado papeleo para que te concedan el préstamo. También es muy práctico si tienes que afrontar un imprevisto como pagar una factura antes de que te hayan pagado por tu trabajo.
Hacer frente a los impagos
Uno de los mayores inconvenientes que puedes tener, sobre todo si acabas de empezar y aún no has generado beneficios, es que tarden mucho en pagarte algo o que ni siquiera te paguen. De hecho, los impagados son el principal motivo por el que muchas empresas tienen que cerrar, ya que no pueden afrontar sus gastos y, aunque se ponga el asunto en manos de abogados se pueden demorar incluso años.
Como es evidente que no se puede adivinar quién es el moroso en potencia a la primera, lo normal es hacer uso de las listas. Aún así, siempre está el peligro de que haya alguien que nos deje a deber una factura, que en caso de ser una cantidad importante podría poner en peligro la viabilidad del proyecto.
A veces se puede tratar de llegar a un acuerdo con quien nos debe el dinero, bien ofreciendo un plan de pago flexible, aunque en otras ocasiones tendremos que recurrir a otras vías como el juicio monitorio o contratar una empresa de cobro de morosos, que se encargue de buscar y seguir a quien nos debe el dinero mientras nosotros seguimos trabajando para no dejar de generar otros ingresos.
Gestionar la documentación
Liquidaciones de IVA e IRPF, gestión de ayudas y muchos otros asuntos requieren tiempo y esfuerzo. Un tiempo que muchas veces no podemos invertir si queremos generar ingresos. Por ello, lo mejor es contar con alguien que se encargue de todo. Es cierto que habrá que pagar por sus servicios, pero teniendo en cuenta el tiempo y los quebraderos de cabeza que nos puede ahorrar, merece la pena. Hasta se le puede pedir ayuda para reclamar gastos hipotecarios si estamos dentro de la lista de quienes pueden recuperar ese dinero.
Nos son los únicos desafíos a los que nos tendremos que enfrentar como emprendedores. Aunque es un punto de partida para poner en marcha un proyecto sabiendo a qué nos enfrentamos. ¿Tienes algo en mente para emprender?
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