Según la sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, a las 16.45 horas, la niña, que entonces tenía 4 años, jugaba sola en un patio comunitario de uno de los bloques de la barriada, momento en el que el condenado se ganó su confianza, la tomó en brazos y le efectuó tocamientos “con ánimo de satisfacer su deseo sexual”.
Una vecina afeó su conducta a Del Valle, quien tras decir que era familiar de la niña, huyó del lugar, por lo que la mujer avisó a la madre de la menor quien, enseguida, denunció los hechos.
La sentencia, que determina una indemnización para la menor de 10.000 euros por el daño moral causado, establece la agravante de reincidencia, ya que en ese momento le constaban a Del Valle otras dos sentencias por delitos de abusos sexuales a menores.
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