El Pleno del Congreso de los Diputados aprobó ayer los Presupuestos Generales del Estado de 2009 de nuevo gracias al apoyo del PNV y el BNG, que hicieron posible que se levantará el veto que traían las cuentas del Senado, la tercera ocasión que esto ocurre con el Gobierno socialista.
Los Presupuestos para el año que viene, los mismos que aprobó inicialmente el Congreso, tuvieron 178 votos a favor –los 169 del PSOE, los 6 del PNV, los 2 del BNG y el del diputado del PP, Mariano Gallego, por error– 163 en contra y una abstención, la del diputado de UPN Carlos Salvador.
Curiosamente, el líder del PP, Mariano Rajoy, no acudió a votar al igual que otros siete diputados del PP y el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran Lleida.
Por su parte, el portavoz de Economía del PP, Cristóbal Montoro, tras la conclusión de la votación, aseguró que el Congreso ha aprobado “los peores Presupuestos de la Democracia” porque traen más paro y más déficit público.
Añadió que en España “carecemos de una política económica que haga frente a una crisis de esta envergadura, que también se va a reproducir el próximo año”.
En el debate, el diputado de CIU Josep Sánchez Llibre instó a los diputados del PSC a que no apoyaran los Presupuestos, ya que si no, advirtió, van a continuar “maltratando a todos los catalanes”.
Por su parte, el diputado de ERC-IU-ICV Joan Herrera reiteró que las cuentas no responden a la crisis y muestran muy poca sensibilidad social con las autonomías, “a las que deja a su suerte” y en una situación “insostenible e insoportable”.
La diputada de NaBai, Uxue Barkos, afirmó que las dotaciones previstas para Navarra son “insuficientes”, y advirtió de que es necesario buscar “nuevos yacimientos de empleo”, y ampliar las inversiones para la ley de Dependencia.
Carlos Salvador, de UPN, mostró su coincidencia con el ministro de Economía, Pedro Solbes, en que las cuentas están “desactualizadas y desfasadas”, y añadió que la situación económica de España no es la misma que cuando se presentaron los Presupuestos.
La diputada de UPyD, Rosa Díez, aseguró que las cuentas son “muy deficientes” y están elaboradas en un escenario económico “irreal”.
Desde CC, José Luis Perestelo calificó las cuentas como “cangrejo”, ya que suponen un retroceso en la inversión para Canarias.
A favor de los Presupuestos se mostró el PNV, a pesar de que su portavoz, Pedro Azpiazu, admitió que son “manifiestamente mejorables” y han quedado “desvirtuados” por las medidas económicas, añadió.
En cualquier caso, justificó su apoyo por que “en la actual coyuntura, la rapidez de las medidas es un valor añadido y un presupuesto aprobado da mejores señales a los agentes económicos”.
Francisco Jorquera, diputado del BNG, explicó su voto en contra del veto, por ser responsables, por ser “útiles” a Galicia.
Pedro Solbes, reconoció ayer una vez más que las previsiones macroeconómicas sobre las que se han realizado los presupuestos “han perdido actualidad”, aunque consideró que esto no debe conducir a una “continua alteración” de las cuentas del Estado.
“Estos Presupuestos siguen siendo válidos para 2009 a pesar de las desviaciones del cuadro macro, que lógicamente se han producido”, señaló Solbes.
El vicepresidente económico admitió que el agravamiento de la crisis ha supuesto que las previsiones que se usaron para crear los PGE hayan “perdido actualidad”, igual que ha ocurrido en otros países del entorno y en las previsiones que realizan otros organismos internacionales.
“Toda revisión de las previsiones no puede conducir, como no lo está haciendo, a una continua alteración de los Presupuestos y tampoco se puede prescindir de las cuentas hasta que se alcance la estabilidad en las previsiones”, dijo Solbes, tras recordar que hay una serie de plazos que obligan a presentar el Presupuesto en un tiempo determinado “aunque algunos lo relativicen”.
Consideró que las cuentas tienen “mayor vigencia si cabe” en el momento actual, a pesar de que la evolución económica afecte a la evolución de los ingresos, ya que contribuyen a la recuperación económica, a crear futuro para compensar la menor inversión de la demanda privada y a dar seguridad y protección a los más perjudicados.
“Estos son los objetivos claves además del importante esfuerzo de austeridad”, subrayó.
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