París, la ciudad de la luz y el amor, está sufriendo una plaga de chinches que afecta a miles de hogares, hoteles y comercios. Estos pequeños insectos, que se alimentan de sangre humana y animal, se han multiplicado en los últimos años debido al aumento del turismo, el cambio climático y la resistencia a los insecticidas. ¿Podría esta plaga llegar a Andalucía?
Según los expertos, las chinches se propagan principalmente por el transporte de personas y objetos infestados, como maletas, ropa o muebles. Por lo tanto, el riesgo de introducir chinches en Andalucía dependerá del flujo de viajeros entre ambas regiones y de las medidas de prevención y control que se adopten.
Según los datos del Ministerio de Salud francés, se han registrado más de 400.000 casos de infestación por chinches en Francia en 2023, lo que supone un incremento del 35% respecto al año anterior. París es la ciudad más afectada, con más de 100.000 casos, seguida de otras grandes urbes como Lyon, Marsella o Burdeos.
Las chinches son insectos de color marrón rojizo, de unos 5 milímetros de longitud, que se esconden en las grietas y los pliegues de los colchones, las sábanas, los sofás o las maletas. Por la noche, salen a picar a sus víctimas, provocando ronchas rojas, picazón e irritación en la piel. Además, pueden transmitir enfermedades como el tifus o la hepatitis B.
La plaga de chinches ha generado una gran alarma social y mediática en Francia, donde se han creado plataformas ciudadanas para denunciar la situación y exigir soluciones a las autoridades. También se han lanzado campañas de sensibilización e información para prevenir y combatir el problema.
ELIMINAR LAS CHINCHES
Para eliminar a los chinches se requiere una intervención profesional y especializada, que puede costar entre 300 y 1.500 euros por habitación, según el grado de infestación y el método utilizado. Entre las técnicas más efectivas se encuentran el calor, el frío, el vapor o los productos químicos.
Sin embargo, muchos afectados se quejan de la falta de recursos y de coordinación para hacer frente a la plaga. Algunos denuncian que los servicios municipales no responden a sus llamadas o que les cobran tasas abusivas. Otros afirman que los propietarios o los gestores de los alojamientos no asumen su responsabilidad o que les ocultan la presencia de chinches.
Ante esta situación, el Gobierno francés ha anunciado un plan de acción para luchar contra los chinches, dotado con 4 millones de euros. El plan incluye medidas como la creación de un número verde gratuito para asesorar a los ciudadanos, la elaboración de un protocolo nacional para la desinfección, el refuerzo de los controles sanitarios y la formación de los profesionales del sector.
El objetivo es frenar la expansión de estos parásitos y recuperar la normalidad en la capital francesa, que recibe cada año a más de 30 millones de turistas. París quiere volver a ser una ciudad limpia y acogedora, donde no haya que temer a las picaduras nocturnas ni a las consecuencias para la salud y el bienestar.
¿Y ANDALUCÍA?
Pero ¿qué pasa con Andalucía? ¿Está libre de este problema? Según los datos de la empresa Anticimex, especializada en control de plagas, recogidos por Europa Press, España no se libra de la plaga de chinches, que ha aumentado un 71% entre enero y septiembre de 2023 respecto al mismo periodo del año anterior. Las áreas más afectadas incluyen ciudades como Madrid y Barcelona, así como regiones interiores de Cataluña, Aragón, la Comunidad Valenciana y las Islas Baleares. Andalucía no figura entre las zonas más infestadas, pero tampoco está exenta de este problema. De hecho, el Hospital Civil de Málaga sufrió una plaga de estos insectos en agosto, lo que ha generado una alerta sanitaria y una queja del sindicato UGT.
Para evitar la llegada y la propagación de las chinches en Andalucía, se recomienda seguir algunas pautas básicas, como revisar el equipaje y la ropa al volver de un viaje, lavar los tejidos con agua caliente o congelarlos si se sospecha que están contaminados, inspeccionar el colchón y las sábanas en busca de manchas o insectos, y consultar a un profesional en caso de detectar una infestación . Así mismo, se aconseja informarse sobre la situación sanitaria del destino antes de viajar y evitar alojarse en lugares con indicios de chinches.
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